Lo que debía ser un simple homenaje seguido de una clase magistral se ha terminado convirtiendo en la peor pesadilla para Roman Polanski. El cineasta franco-polaco nacido en 1933 fue arrestado el pasado Septiembre a su llegada al aeropuerto de Kloten - Zúrich en relación a un caso viejo de más de 30 años: la supuesta violación en 1977 de la menor Samantha Geimer, quien tenía entonces 13 años.
Según comunicaron los responsables del festival a los medios acreditados, Polanski fue arrestado en relación a esos cargos, que nunca prescribieron según la interpretación de Peter Espinoza, juez californiano encargado del caso, aunque la supuesta víctima retiró los cargos contra Polanski hace ya años. Dada su condición de ciudadano francés, el director de Lunas de Hiel no podría ser extraditado a los Estados Unidos, aunque la situación se complica dada su presencia en Suiza, país que no forma parte de la Unión Europea.
Polanski huyó de Estados Unidos en 1978 mientras estaba en libertad bajo fianza de 2.500 dólares y tras haber pasado unos meses en prisión en Chino (Los Ángeles) por los cargos de abuso sexual de la menor de 13 años y del que Polanski se declaró culpable, por lo que fue enviado a prisión en "evaluación" durante tres meses, aunque sólo pasó 47 días. Tras huir de la justicia, el cineasta obtuvo la ciudadanía francesa, evitó la extradición y no volvió a pisar territorio estadounidense. Ni siquiera acudió a la ceremonia de los Oscar de 2003 cuando obtuvo el premio de mejor director por El Pianista.
Los abogados del director de cine presentaron su pedido ante una corte de apelaciones en Los Angeles, afirmando que un sin número de vicios ha manchado el proceso de Polanski, actualmente en prisión domiciliaria en su chalet de la estación de invierno suiza Gstaad y a la espera de una eventual extradición a Estados Unidos.
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Chad Hummel y Bart Dalton pidieron a la corte que se pronuncie en un plazo breve y en ausencia del cineasta. "Un exámen immediato es una necesidad imperante", indicaron los letrados en su pedido. La defensa de Roman Polanski, de 76 años, ya había pedido que se abandonaran las acusaciones en contra al considerar que el proceso había sido desbalanceado por tratarse de un personaje público.
Pero hasta ahora la justicia estadounidense ha rechazado todos estos pedidos por parte de la defensa de Polanski, incluso se niega a pronunciarse en su ausencia.
El Museo del Cine de Düsseldorf inaguró el mes pasado una exposición en la que se rinde homenaje a Polansky como director y guionista y recorre su producción cinematográfica a través de 200 objetos, documentos y fotografías de sus filmes.
Polanski, fué el ganador del Oso de Plata al mejor director por "The Ghost Writer" en la última Berlinale, es "uno de los más grandes cineastas de los últimos cincuenta años", afirmó el director del Museo, Bernd Desinger, en la presentación de la muestra
Libertad para Polanski !!!