La Alianza podría estar en la nación norteafricana hasta finales de año. Admite Qatar la participación de sus tropas en la guerra contra Gaddafi
DOHA, octubre 26.— El autoproclamado Consejo Nacional de Transición (CNT) pidió este miércoles a la OTAN extender al menos hasta fin de año su presencia en el país, mientras Qatar admitió su participación con tropas en el terreno y difundió un plan para sustituir a la Alianza, cuando se incrementa la polémica por la forma en que asesinaron los opositores armados y el bloque militar asesinaron a Muammar al Gaddafi.
Tras un primer requerimiento para extender durante un mes las operaciones militares, como se conoció la víspera, el presidente del CNT, Mustafa Abdel Jalil, realizó el pedido a la OTAN en el marco de la reunión en Doha con países que apoyaron a los opositores armados.
Mientras, la Alianza postergó hasta el viernes la reunión prevista para este miércoles en la que se definirían los plazos de su presencia en el país africano, para dar tiempo al secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen, a realizar consultas con Naciones Unidas y el CNT.
Al margen de la reunión de Doha entre el CNT y la OTAN para definir el futuro de Libia, el jefe de Estado Mayor del ejército qatarí, general Hamad ben Ali al-Attiya, reconoció este miércoles que cientos de soldados de su país participaron en las operaciones militares en Libia junto a las fuerzas opositoras, en el primer reconocimiento oficial del rol que tuvieron en el conflicto.
Hasta ahora el emirato solo reconocía que brindaba asistencia logística y supuestos asesores, además de participar en la agresión aérea de la OTAN. Aviones de Qatar y de los Emiratos Árabes Unidos apoyaron las 26 000 incursiones de la Alianza en Libia, que incluyeron 9 000 bombardeos y la destrucción de unos 5 900 objetivos militares desde el 31 de marzo.
Los soldados de Qatar «estaban presentes en todas las regiones, asegurando las operaciones de entrenamiento y las transmisiones» de contactos entre los elementos armados del CNT y la OTAN, sostuvo Al-Attiya.
Qatar también fue uno de los primeros países en reconocer al CNT como autoridad legítima en Libia y suministró públicamente ayuda en armas, agua y más de 400 millones de dólares, además de propiciar la comercialización del petróleo libio a terceros.
Previamente, en la apertura de la reunión, Mustafa Abdel Jalil, presidente del gobierno interino libio del CNT, dijo que Qatar había sido un «socio importante» en todas las batallas contra Gaddafi. «Los qataríes allanaron el camino para que el CNT asumiera gradualmente el control de las ciudades y pueblos de Gaddafi, hasta la caída de Trípoli», destacó Jalil, sin dar más detalles.
Asimismo, Al-Attiya manifestó que una fuerza multinacional conducida por Qatar puede sustituir a la OTAN en Libia para el proceso de estabilización política del país y el entrenamiento de las fuerzas de seguridad. En esa fuerza, propuesta ante el cese de la presencia de la OTAN también participarían Estados, Gran Bretaña y Francia, los cuales lideraron la guerra contra Libia.
El general qatarí también sostuvo que Doha desarrolla un programa de entrenamiento de libios para garantizar la seguridad de sus pozos petroleros y sus fronteras.
También, la familia de Gaddafi anunció que demandará a la OTAN por crímenes de guerra ante la Corte Penal Internacional tras la muerte del líder libio.
El enviado especial de Naciones Unidas para Libia, Ian Martin, ratificó que Gaddafi y su hijo Motassim fueron víctimas de maltratos y muertos en circunstancias que deben ser investigadas.
Martin también alertó al Consejo de Seguridad sobre la reportada ocurrencia de asesinatos que pueden ser catalogados de crímenes de guerra cometidos por los dos bandos durante la parte final de los combates por el control de la ciudad de Sirte.