¡Buenos días! Hoy quiero hablaros de un nuevo proyecto en el que me he embarcado.¿Conocéis la frase de meterse en camisa de once varas?Pues yo lo he hecho en chaleco con enchufes.Y es que comienza la operación bikini y es hora de que os cuente lo que siento después de meses de probar el EMS. Pero olvidaros, no voy a contar la información básica de la Electro-estimulación Muscular, porque para eso ya tenéis la web oficial del centro.Lo que voy a hacer aquí es contarles a mi manera mis cambios físicos, dudas del EMS, molestias y beneficios de esta nueva técnica. Como os comentaba al principio, llevo apuntada a esto del EMS desde Noviembre del año pasado y la verdad que me ha ido bastante bien. Así que creo que es un buen momento para que os cuente qué cambios he notado para que saquéis vuestras propias conclusiones.
Todo empezó hace unos meses, cuando volviendo del trabajo vi que habían abierto un nuevo centro de EMS al lado de mi casa, que ponía "Sólo 20 minutos a la Semana", y eso a mí... eso a mí me enamoró. Porque que queréis que os diga, el tiempo es oro y cada uno se pone prioridades en la vida, y la de ir al gimnasio no estaba para nada en mi Top5. Sí, lo sé, error garrafal, mal, muy mal. Pero entre que no tengo mucho tiempo libre, lo de meterme en una sala llena de gente, pelearme por una bicicleta y una ducha, son cosas que no me terminaban de motivar. Y lo he probado todo para intentar cogerle el tranquillo a esto del deporte, os lo juro, desde prometerme a mi misma que iba a salir a correr, a hacer el método Osmin (¿Os acordáis de "Agua, Pescado y Ensalada"?), pasando por la bici estática en casa mientras veo series, o clases de yoga. Pero nada.¿Salir a correr? Dos días. ¿Lo de Agua, Pescado y Ensalada? Sí, eso iba bien, pero no si por la tarde te entra mono de dulce y te comes un cupcake y un batido. ¿La bici estática? Me quedaba embobada viendo la serie y lo último que hacía era pedalear. De lo del yoga no hablemos por favor, porque aunque me muera de vergüenza, os confieso que he llegado hasta roncar. Así que entré en Nubody a preguntar tarifas, horarios y ver un poco qué se cocía ahí dentro. Y la verdad es que pintaba todo bastante bien.Salas de ejercicio sólo para ti, vestuario bonito, y lo mejor, una atención 100% personalizada.¿El ejercicio?Un misterio hasta el momento, sólo sabía que por lo que parecía, unos 20 minutos de esta técnica equivalían a casi 3 horas de gimnasio.¿Así que cómo me iba a ir de ahí sin probarlo?Puse fecha e hice mi primera clase de prueba... el resto ya vino rodado y os lo contaré con detalle en el próximo post. El centro que yo voy está en Conde Altea 22, muy cerquita del Centro de Valencia, pero también tienen otro en el Parque Tecnológico.Y lo mejor es que están de cumple así que, puedes entrar en su web para pedir cita y conseguir una sesión gratis: http://www.nubody.es/
Como adelanto os digo que sin duda, con lo que estoy más contenta es con el resultado que me ha dado para los dolores de espalda. ¿Parece extraño, verdad? Pues no lo creáis, porque el chaleco del EMS ejerce una presión que ayuda a fortalecer los músculos de la espalda. Pero todo eso y más te lo contaré en los próximos posts junto al resto de cambios por los que estoy pasando estas últimas semanas a medida que el ritmo del EMS sigue aumentando.
¡Hasta la próxima, os espero haciendo EMS! ******************************************* ****************************************************