La compañía Eli Lilly anunció ayer que aumentó su presupuesto
para la producción de insulina a más de US$1,000 millones para los próximos
años. Esto representa más de US$700 millones en comparación con lo anticipado
hace tan solo un año. Parte de la inversión también contempla partidas para
investigaciones sobre la diabetes.
El cambio de política obedece a un aumento en la proyección
de la prevalencia de la diabetes en todo el mundo en los próximos años. La prevalencia es el porcentaje de una
población que tiene una enfermedad determinada en un momento dado.
Según la Federación Internacional de la Diabetes, para 2011 habían 366
millones de diabéticos en todo el mundo, lo que constituye un gran mercado. Este aumento se debe al incremento de
la obesidad, a su vez causado por la sobrealimentación y la inactividad física,
pero también a que las personas hoy día viven más.
En América Latina y España, el 11-12% de la población adulta
tiene diabetes, en contraste con solo 7-8% en el resto del mundo.
Eli Lilly
& Co. es el segundo productor mundial de insulina, detrás solo de Novo
Nordisk, y pionera en su comercialización, cuando en 1923 produjo la primera
insulina disponible para tratamiento en humanos. Hasta entonces, todos los
pacientes con diabetes tipo 1 y muchos pacientes con diabetes tipo 2
enfrentaban una segura sentencia de muerte.