Revista Cine
De una época en la que no se complicaban la vida a la hora de hacer cine y de la mano de un director que huye de la grandilocuencia, nos llega esta película que puso de moda los buddy films inspirando posteriormente otros largometrajes similares. Al debutante Eddie Murphy se le nota que aún necesitaba algo más de rodaje en la gran pantalla en contraposición a un Nick Nolte que lo clava como policía que está de vuelta de todo comiéndose a su compañero a base de puyas y mal humor. Lo más flojo es la persecución que copa una trama que da demasiadas vueltas sobre lo mismo con demasiados momentos en los que no ocurre nada haciendo que el grato recuerdo que teníamos de ella se vea ensombrecido por la inevitable nube del tiempo.Mi puntuación: 5/10