Según Angela Merkel “Debemos contener la explosión de costes en los subsidios a las energías renovables. Uno de los primeros grandes proyectos del nuevo gobierno federal será enmendar la legislación de las energías renovables.”
A partir de aquí, en Alemania empezaron a surgir todo tipo de comentarios. Esta idea ha sido planteada en las negociaciones del partido de Merkel, la CDU, junto con los socialistas para la futura legislatura.
El objetivo es reestructurar el régimen de subsidios, que han conseguido favorecer a la transición hacia energías renovables para las industrias intensivas en consumo energético y disminuir la generación renovable.
Es adecuado destacar, que las exenciones a las industrias intensivas en consumo de energía, que optan por consumir energías renovables supone una cantidad de 2.300 millones de euros anuales. Y los mecanismos de financiación, de estos costes, están relacionados directamente con el precio de la energía eléctrica de los hogares y de las empresas alemanas, ya que, han de pagar además de su recibo de la luz, una parte de esta operación de transición energética.
Lo que pretenden las propuestas, además de reducir las exenciones, es reestructurar el régimen de subsidios repartiendo la carga de forma más equitativa. Esto implica que se incluirán en la financiación de esos subsidios a las industrias, que hasta el momento, habían estado exentas, y que eran receptoras netas de las exenciones.
En definitiva, según los cálculos del Gobierno Federal, el conjunto de los subsidios a las tarifas de las energías renovables supondrán una carga fiscal sobre la administración pública de 23.600 millones, en 2014.
Fuente: La Vanguardia
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