Revista Opinión

lindsey buckingham: La vida interior de un músico problemático

Publicado el 19 noviembre 2018 por Johnny Zuri @johnnyzuri
lindsey buckingham: La vida interior de un músico problemático

lindsey buckingham: La vida interior de un músico problemático  – Fleetwood Mac disputaba un día de 2018 la demanda de Lindsey Buckingham. El guitarrista deseaba que la banda le pagara una parte de una Gira, tras prescindir de sus servicios. Hubiera recibido al menos doce millones de dólares americanos. Kristen Foster afirmaba que “Fleetwood Mac esperaba deseosa su día en la corte. Buckingham aducía que la banda le anunció solo con cinco días de antelación que saldrían de Gira sin él.

La Gira empezó el tres de octubre con Mike Campbell y Neil Finn en vez de Buckingham. Pero algo debe tener Lindsey Buckingham cuando el batería Mick Fleetwood, afirmaba que había visto ramalazos de un genio tras escucharle por vez primera en su vida. Buckingham es más que un gran guitarrista, muchos lo consideran un genial músico, un perfecto arreglista y productor.

Lindsey Adams Buckingham nació un tres de octubre de mil novecientos cuarenta y nueve en Palo Alto, California. A los trece años abandonó la natación para dedicarse por completo a su otra pasión, la música. Esta había empezado escuchando los cuarenta y cinco revoluciones de su hermano Jeff, llegando a aprenderse el solo del Heartbreak Hotel de Elvis con una guitarra de juguete.

lindsey buckingham: La vida interior de un músico problemático
El sueño se hizo realidad, pero hubo que pelearlo. Un día el productor Keith Olsen les logró un contrato con Polydor y se pudieron a grabar su primer disco, llamado sencillamente Buckingham Nicks. Empezaron a mejorar el sonido suave de la Costa Oeste con el que lograrían el éxito. Aunque fue un descalabro de ventas, y la compañía anuló su contrato. Así fue como Buckingham se fue de Gira con Don Everly.

Buckingham se transformó en un arquitecto técnico del nuevo sonido de su banda. Pero su carácter perfeccionista, diciendo de qué manera debían tocar la batería y el bajo, chocó con John McVie, que le dejó clara una cosa: “La banda en la que estás es Fleetwood Mac. Yo soy el Mac. Yo toco el bajo. Nunca acabarían de simpatizar. Aún así Buckingham les daría el sonido, y Fleetwood y Mac pondrían la base rítmica.

Un disco alcanzó el primer puesto en la lista de ventas, cuando el conjunto ya estaba en Sausalito grabando. Pero para entonces las dos parejas de la banda se separaban y, para colmo, la mujer de Fleetwood le estaba engañando con su mejor amigo. En este enrarecido entorno se gestó la pieza maestra de la banda. Buckingham, Nicks y Christine McVie, decidieron dar rienda suelta a la pluma y fueron comentando el desmoronamiento de sus relaciones en canciones.


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