Se acerca el momento
Al principio parecía una amenaza más, pero parece ser que la cosa se va fraguando y pronto será una realidad. Como difundir este tipo de datos sensibles es ilegal, la solución es muy simple: nos cambian la ley. Es algo que usted y yo, como ciudadanos no podemos hacer. Imaginemos que ir a 120 por autopistas de 4 carriles nos parece poca velocidad y no queremos que nos multen… la solución sería cambiar la norma, pero evidentemente no está en nuestra mano hacerlo. Ahora bien, aquí es al contrario, son ellos y no nosotros los que quieren saltarse la ley… y ellos sí que pueden cambiarla. Hablo de la lista de grandes defraudadores y morosos de Hacienda.
Bien, la reflexión la hago, ya no por el hecho de que me parezca bien o mal que se publique esta lista de grandes defraudadores y morosos, sino para que mis lectores se queden con el dato de lo que ocurre aquí, de lo fácil y simple que es que nos cambien las reglas del juego cada vez que a ellos les interesa. Las reglas (se supone) son para todos, pero si solo una parte de los que juegan tienen capacidad de cambiarlas, eso es tanto como decir que las reglas son solo para una parte de los jugadores (nosotros). El resto es un mero espejismo.
Tal vez por eso el Sr. Montoro se permitió el otro día hacer otra barbaridad cuando acusó a los medios de comunicación de estar presionándole porque mantenían una deuda importante con Hacienda. O sea; ya no se trata de que publique o no publique esas deudas, sino que se permita públicamente acusar a alguien (en este caso a unos medios de comunicación) de, por decirlo de alguna manera suave, estar chantajeándolo.
No son formas, eso no son maneras de actuar cuando lo que decían los medios era que querían aclaraciones sobre los motivos de las destituciones en la Agencia Tributaria y si había habido trato de favor o no a algunas grandes empresas.
La Agencia Tributaria ya no es lo que era, ya no tiene, ni la solvencia ni la credibilidad que tenía hace unos años. A los ciudadanos ya no nos vale eso de “Hacienda somos todos” porque yo no nos lo creemos. Creo que a estas alturas no se lo cree ya ni el más incauto.
Con este objeto se añade un nuevo apartado 3 al artículo 95 de la Ley General Tributaria que reza así: «Los datos, informe o antecedentes obtenidos por la Administración tributaria en el desempeño de sus funciones podrán ser comunicados a terceros con el objeto del fomento del cumplimiento del deber general de contribuir del artículo 31 de la Constitución y la prevención del fraude fiscal». También se añade un nuevo artículo 95 bis, que establece que «la Administración tributaria acordará la publicación periódica de listados de defraudadores».Así que bueno, lista de grandes defraudadores y morosos… ¿sí o no? No es esa mi preocupación; mi preocupación son las modificaciones ad hoc de las leyes.
Ramón Cerdá