Frank Langella es un seductor vampiro en Drácula (1979). Para él, la música de los lobos es “sad” (triste), y las palabras son dichas a Mina, a quien quiere conquistar en plan melancólico. Ni rastro del acento transilvano en este actor norteamericano.
En el Dracula de Coppola (1992), el londinense Gary Oldman, al pronunciar la famosa cita ¿acaso no imita a Bela Lugosi? Fijaos también que añade el adjetivo “sweet” (dulce).