Como siempre, una ficha técnica:Título: Artemis Fowl. El último guardián (Artemis Fowl and the last guardian, 2012)Autor: Eoin ColferEditorial: MontenaGénero: fantasía juvenilAño de publicación: febrero 2014Páginas: 364Edición: tapa dura sin sobrecubiertaWeb: Eoin Colfer & Artemis FowlExtras: Booktrailer 1 & Booktrailer 2Valoración: 9/10
¿De qué trata?
Opal Koboi, la peor enemiga de Artemis Fowl, ha abierto la puerta de los Berserkers, un ejército de guerreros mágicos encerrados en las entrañas de la Tierra y sedientos de venganza. Con su apoyo y la ayuda de los poderes mágicos Opal ha decidido destruir por completo a la raza humana. Pero Artemis no se deja intimidar: debe salvar a sus hermanos y combatir los planes de su enemiga y sus mágicos aliados. Artemis se enfrenta a ellos contrarreloj, consciente de que su propia vida está en peligro...
Artemis Fowl 8/8: Artemis Fowl // Encuentro en el ártico // El cubo B // La venganza de Opal // La cuenta atrás // Artemis Fowl y su peor enemigo // La hora de la verdad // El último guardián
Lo que vais a leer a continuación, entonces, es una reseña sentimental en toda regla, porque aunque para muchos sea la octava parte de una serie juvenil de fantasía, para mí supone una de las más dolorosas despedidas respecto a personajes e historia. Hace más de 10 años que empecé mi travesía con el gran Artemis Fowl, y hoy vengo a despedirme por todo lo alto, por lo vivido y lo que queda por vivir en mi memoria.
Artemis Fowl. El último guardián es la tarjeta de despedida del genio juvenil irlandés Artemis Fowl, tal y como se hace conocer en su tarjeta de presentación, que con 12 años les robó el oro a los duendes y ahora, con 15, es todo un experto en salvar el mundo. En esta ultima y apoteósica entrega, Artemis se enfrenta por enésima vez a su archienemiga, Opal Koboi, quien no contenta con ser derrotada una y otra vez desde el cuarto libro, vuelve a las andadas y con el movimiento final: despertar a los bersekers para destruir el mundo. Aunque cuando leí la sinopsis no las tenía todas conmigo en si podría ser una historia digna, he quedado muy impresionada con esta última entrega de Eoin Colfer.
En Artemis Fowl. El último guardián se respira el final en cada capítulo, no solo en el acontecimiento en sí, pues hablamos del fin del mundo humano, sino de los propios personajes. Artemis se muestra más humano que nunca, ha llegado al final de su propia evolución como antihéroe a lo largo del os libros, pues ahora se preocupa por su familia y amigos, e incluso le cuesta idear su último plan, su obra maestra para vencer a Opal, y ello ya nos hace presagiar que no saldrá nada bueno de un libro que, vaya, no podrá tener continuación.
De esta manera, la novela presente pierde ligeramente el gusto juvenil de la saga, al menos esa es la impresión que me ha dado, pues en este libro mueren una serie de personajes de una manera tal atroz que nos hace rememorar constantemente la pérdida de cierto secundario sagaz de libros anteriores, para recordarnos que incluso en el mundo mágico, hay maldad. Opal es más mezquina que nunca y la lucha que mantiene con Artemis es encarnizada e intensa, excelsa para dos enemigos eternos, pero que nos hará leer con amargura y esperar que nuestro personaje preferido llegue de una pieza hasta el final. Y qué final. Ya solo con la propia profecía de los bersekers podemos vaticinar un final más que agridulce, e incluso siendo nuestro protagonista quien es, no podemos remediar cierta cara de estupefacción cuando llegamos al último capítulo. Parece que a Colfer se le ha pegado ser también un antihéroe. Claro está, luego nos ofrece un pequeño epílogo a modo de bálsamo para las heridas.
Qué decir. Artemis Fowl. El último guardián ha estado a la altura de mis expectativas, las ha superado y me ha dejado con el estómago encogido porque, tras este último acto, solo quedará el recuerdo de mil vivencias junto a Artemis, Holly, Mayordomo y demás. Ha sido una aventura intensa, apocalíptica incluso, donde en cada página se respiraba el ambiente de siempre, pero también el inevitable adiós de quien merece un descanso. Una saga juvenil, juvenil sólo en apariencia, que recomiendo a todos aquellos que busquéis un poco maquiavelismo en vuestras páginas. Hasta siempre, Artemis Fowl.