A las 15:30 hubo un relevo en el puente ferroviario de la calle de Móstoles del maestro de ajedrez Pablo Sansegundo a Antonio Mañero, por aquel entonces director del Patronato Municipal de Deportes. Más tarde, en la Plaza de España, Mañero hizo entrega de la antorcha al alcalde José Quintana. Después, la llama olímpica se dirigió a Toledo, atravesando los pueblos madrileños de Humanes, Griñón, Cubas y Casarrubuelos.
En la imagen, del Colectivo Fotográfico de Fuenlabrada, se ve la antorcha olímpica por la calle de Móstoles. Al fondo, los edificios de El Naranjo y justo a la derecha, la empresa de FRAMO.
Muchos fuenlabreños acudieron a las calles para visualizar la llama olímpica, de la que más tarde, el 25 de julio se colocó en el pebetero del Estadio Olímpico dando inicio los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.
(Pincha en la imagen para ampliarla) | Calle Móstoles en 1992
AUTOR de la imagen: Colectivo Fotográfico de Fuenlabrada