Llega diciembre…

Seguramente llega el mes más esperado por muchos y, a la vez, el más denostado por otros. Diciembre ya está aquí. Mes de encuentros y desencuentros, de fiestas y, a la vez, de soledad, de felicidad y de infelicidad. Casi nadie es indiferente ante este mes final del año! Llega la época en la que el día es el más corto y la oscuridad se extiende ante nuestros ojos. La noche se alarga. Pero en el Alma brillan las estrellas en la noche oscura. Pronto empezará el frío invierno…

Es curioso lo conmovedor que resulta el mes de diciembre, con sus fiestas de Navidad! Aún así, conozco poca gente que las espere con ilusión, aparte de los niños, claro está! Remueve corazones, despierta sonrisas en los niños y resucita ausencias de personas amadas que no están! Quizás es el frío clima o tal vez la calidez del hogar, lo que despierta pasiones o bien hiela los corazones!

Para mí la Navidad siempre había sido un triste encuentro conmigo mismo y la soledad, aunque rodeado de familiares! Época de sonrisas artificiales, de apretones de manos, de luces de colores, de regalos y de ágapes sin fin! El fin de un nuevo año que se lleva el tiempo y el inicio de otro nuevo año por vivir! Resúmen, análisis, evaluación y nota del nuevo año que se fue! Otro más! Y, con él se llevó personas, momentos y lugares irrepetibles que quizás ya nunca volverán… con el mismo sentido! Simplemente porque la vida no se repite, todo empieza de nuevo y todo acaba cíclicamente, sin parar… aunque en el Alma todo sigue igual! Es tiempo de guardar lo mejor vivido del año, es tiempo de celebrar lo que queda por vivir con ilusión!

Pero, acabando el año, te das cuenta de que hay unos años mejores que otros! Aún así, como cada año, hay felicidad e infelicidad, a partes iguales! Pero yo, con el tiempo, he aprendido a no juzgar, así como a vivir intensamente lo que me procura felicidad! Seguramente este año que se desliza hacia su fin, ha sido un año singular, mágico e irrepetible, como el que más! Tal vez algo tiene que ver mi actual forma de ver, sentir y vivir la vida, más que, por las circunstancias cambiantes y vividas…

En este año que se acaba, descubrí el amor y a su compañera inseparable la serenidad! Este mágico año me ha brindado la oportunidad de conocer a la persona hoy más singular e importante de mi vida! Este año aprendí el valor del silencio y la soledad con sentido, de su verdadera compañía, aún en la distancia! Este año me ha traído paisajes, rincones y momentos para disfrutar de lo simple, cotidiano y bello de la vida, sintiéndome siempre bien acompañado, por amor! No ha sido un año, en todo momento, fácil y sereno, pero ¿alguno lo es, en realidad? Tal vez he sabido encontrar el sentido del amor a todo lo que he vivido y eso me ha traído paz. Ha sido un año de despedidas, de bienvenidas, de vaciarme y de, día a día, volverme a llenar! Al final, lo supérfluo desapareció de mi vida y lo esencial se redescubrió por si mismo, simplemente dejando salir la verdad de dentro de mi corazón!

Quizás si tuviera que resumir este año que acaba en este mes de diciembre que hoy empieza, debería decir que todo lo que viví en él permanecerá para siempre ya en mi vida y en mi corazón! Ha sido un antes y un después en mi vida, porque descubrí el amor de verdad! Y con él, esas personas, esos momentos y esos lugares singulares los viví en cada instante como únicos, mágicos e irrepetibles! Cada uno tiene su lugar en mi corazón… y para siempre!

No soy capaz ahora de dibujar el futuro de mi vida, ni tan siquiera para el nuevo año que pronto se iniciará! Aún asi, no sé cómo y dónde acabaré este año ya viejo, ni donde empezará el siguiente, que en unos días llegará! Pero no tengo miedo ante la incertidumbre cotidiana, he aprendido a confiar en la vida! Sí sé, en cambio, cómo, con quién y dónde estará mi corazón, pero deberé dejar que la vida diga la suya! Hoy solo sé cierto dónde está ahora mi gran amor… y eso me bastará, en todos los momentos que me queden por vivir! He tardado demasiados años en encontrarlo, en que llegara su luz a mi vida y me hiciera salir de la oscuridad, como para recordar este año como el más importante y mágico que, seguro, viviré en mi vida! Quizás, por fín este mes de diciembre que hoy empieza, me traerá la primera y la verdadera Navidad, esa que desde niño había deseado! Esté donde esté yo, ya sé bien que la Navidad de mi corazón ha comenzado y que, mientras pueda, cada día será Navidad!

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