Cuando llega el momento de personalizar un espacio, no hay lugar que hable más de la personalidad de las personas que lo habitan que los recuerdos, las fotos o los objetos de coleccionista. Y es que es este el detalle con el que sin duda, daremos que hablar y cada interior será diferente.
Un lugar plagado de información y recuerdos que denotara que ahí han existido vivencias, sensaciones, o que el habitante es amante de una afición, de su familia o sus pasiones.
Por eso, cuando me toca diseñar un espacio, por grande o pequeño que sea, no hay nada más enriquecedor y junto con lo cual conseguiré que algo, por ínfimo que sea, hable de su propietario.
Un restaurante tradicional y aventurado, una vivienda pulcra y nórdica, o un elegante despacho pero con aires retro. Todo ello aderezado de color, pinceladas naturales o como darle el punto exacto de personalidad.
Por ello no debemos olvidar nunca las opciones que se nos presentan como inspiración o las soluciones de impresión que conseguiremos a golpe de click y con las que sin duda podremos sorprender a unos y otros. Porque sin duda, las imágenes, la fotografía pueden ser la idea perfecta para conseguir esto.
Y es que son un montón las aplicaciones fotográficas que podemos encontrar o las composiciones con las que por ejemplo, deleitar el espacio.
Aquello que te va a diferenciar y con lo que sin duda tu casa o negocio destacara, es porque la personalidad de un elemento, decoración o acabado saldrá con respecto a la mayoría. Así que atrévete y salte de lo convencional dándole tu impronta diferente o arriesgando en las elecciones.
Desde combinaciones de collage, formales, informales o dinámicas que nos cuentan una historia, un recuerdo o como no, ese arte tan conceptual y que solo nosotros y los nuestros apreciamos.
O porque no, lienzos de gran formato que en lugar de pender de una pared, se encargan de profundizar en la proyección del espacio del dormitorio.
Nada de cabeceros, si no una imagen impactante.
Los moodsboards están destinados a diseñadores, pero cada vez más podemos ver soportes que nos permitan integrar imágenes, recortes o porque no nuestra inspiración en el espacio.
No descartaría crear uno en un interior en el que querría dar un toque de orden desordenado.
Puede quedar espectacular ¿no creéis?
Las acciones, los sentimientos o sencillamente arte. Podemos infundir una reacción más allá de algo escrito o conceptual, llamando la atención del espectador por una imagen impactante o por la profundidad con la que ese espacio gana en color.
Si tu tuvieras que elegir alguna personalización del espacio con fotografías ¿Cuál seria su aplicación?