Revista Televisión
Si no has vivido desconectado del mundo los últimos quince días, sabrás de que hablo si digo Lo Imposible, y habrás sido bombardeado por la brutal campaña promocional de la película (producida por Mediaset entre otros).
Hay razones mas que buenas para acercarse a ver Lo Imposible sin que te machaque la publicidad. Ewan McGregor, Naomi Watts o haber visto la anterior película del director, J.A. Bayona son motivos mas que suficientes.
Así que compre mi entrada desde casa (casi no recuerdo la ultima vez que fui a taquilla para eso), en una sesión temprana después de comer, en V.O.S, y me fui al cine. Pero al parecer me olvide la empatia en casa, porque fui incapaz de sentirme identificado con nada de lo que sucede en la película.
Lo Imposible es una película impecablemente hecha, con una primera hora muy medida y bien llevada. Los efectos son espectaculares y seguro que ganara premios por ello, como supongo les puede pasar tanto a su director como a los actores. Pero a mi la película me parece totalmente prescindible.
Quiero decir que no entiendo muy bien el motivo de que se haya hecho, por que una vez metidos en la desgracia de que te pille un tsunami la historia no tiene nada de especial, de hecho estoy seguro que hay historias infinitamente mas interesantes y jodidas, sin necesidad de llegar al sentimentalismo barato. Tiene un par de momentos emocionantes donde casi consiguió que llorara, pero tiene mas que ver con el hecho de que ayuden a gente en esa situación que por la historia de la familia.
No soy capaz de entender todas las alabanzas y buenas criticas que he oído estos días, de una película que de no tener la parafernalia que tiene detrás, quizás hubiese pasado sin pena ni gloria. De hecho es la primera película de Ewan McGregor que no me gusta (si las he visto todas), pero se que el problema no son los actores, es el fondo de una historia que no tiene nada de extraordinario mas allá de la suerte de sobrevivir a una catástrofe, que será maravilloso, pero no necesariamente entretenido ni interesante.
Lo imposible es técnicamente perfecta, y en contra de lo que va a decir todo el mundo, esta muy vacía.