La alimentación no sólo es nuestra “gasolina”, también es crucial para la salud de la piel
Los alimentos que tomamos pueden tener una gran repercusión en la salud de la piel y en el aspecto del cutis. Es importante que tengas claro qué alimentos pueden estar perjudicándote, y cuales pueden ayudarte. Si tu dieta es correcta, podrás conseguir que la juventud y la energía se reflejen 100% en tu piel. Hoy te damos las claves.
Cítricos, fruta y pimientos
Los alimentos ricos en vitamina C son perfectos para la piel, por el poder antioxidante de esta vitamina. Si quieres saber más sobre su importancia, te recomendamos leer este post.
Salmón, huevos y lácteos
Estos alimentos contienen vitamina D, de alto poder nutritivo. Es buena para sintetizar el calcio y mantener los huesos fuertes. Recuerda: una pérdida de masa ósea puede contribuir directamente a la flacidez en la piel. El salmón, además, tiene Omega 3, un poderoso ácido graso que también favorece el mejor aspecto del cutis.
Frutos del bosque
Arándanos, moras y fresas son una gran fuente de antioxidantes. ¡Incorpóralos a tu dieta como snacks!
Tomates
Algunos alimentos, como los tomates, son ricos en betacaroteno. El betacaroteno potencia la melanina y por tanto, nos protege del sol y además hace que nuestro bronceado sea mucho más saludable y bonito.
Agua
El agua es esencial para la salud de la piel. Como pauta general, debería beber 2 litros al día. Puedes añadir rodajas de fruta o infusiones, por si te cuesta mantener la rutina. Gracias al agua, tu piel se mantendrá hidratada también por dentro y favorecerás la eliminación de toxinas.
Cosas a evitar
Para conservar la salud de la piel, es importante que te plantees reducir al máximo o eliminar de tu dieta ciertos alimentos. La sal, por ejemplo, favorece la retención de líquidos y puede hacerte sentir hinchada o que tu circulación no funcione correctamente. Además, hace que bolsas y ojeras se formen con más facilidad. Los alimentos fritos están repletos de ácidos grasos que provocan la acción descontrolada de radicales libres. Por su parte, el alcohol, puede contribuir a la deshidratación de la piel y a su pérdida de luminosidad.