Año: 2015ISBN: 978-84-0101-574-8Nº de páginas: 544
Lo que esconden las olas es el título de la segunda novela publicada por Emma Lira, una autora que se dio a conocer hace un par de años con Búscame donde nacen los dragos, con la que obtuvo un notable éxito. Es por eso que tenía ganas de leer algo suyo, así que cuando se me presentó la oportunidad de recibir un ejemplar de este libro, en el que además ya me había fijado, no dudé en aceptarla.
La trama de "Lo que esconden las olas" discurre a través de dos planos temporales. Por una parte nos situamos en el año 2006 en el pueblo de Cabo de Palos, en el cual se ha instalado el joven venezolano Sandro siguiendo el rastro de su tatarabuelo, implicado en unos hechos que tuvieron lugar en la costa de esta localidad hace más de cien años, y para los que él intenta encontrar respuestas. Aquí conocerá a Paula, quien participa en un proyecto para realizar un documental conmemorativo del naufragio del Sirio, barco que se hundió en la zona hace un siglo ocasionando la muerte de un gran número de pasajeros, proyecto del que Sandro también entrará a formar parte. Será así como poco a poco vayan desvelando retazos de la historia del barco, desvelando una serie de datos que les permitirán formular sus propias teorías sobre lo sucedido realmente en torno al accidente que causó su naufragio. Al mismo tiempo y a través de una segunda línea temporal nos trasladaremos hasta el año 1906 para ser testigos de lo sucedido a bordo del Sirio, transatlántico italiano que navega rumbo a Buenos Aires y que, inexplicablemente, a unas millas de la costa de Cartagena, naufragará.
Emma Lira
Es indudable que la lectura nos sirve de entretenimiento pero hay algunas obras, como esta de Emma Lira, que además son un excelente instrumento de aprendizaje pues nos permiten ampliar nuestros conocimientos sobre hechos que nos eran desconocidos o sobre los que no sabíamos demasiado. En mi caso, anteriormente no había oído hablar del naufragio del Sirio a pesar de haberse producido cerca de la costa española y de las dimensiones que tuvo esta tragedia, comparable a la del mismísimo Titanic, y que sin embargo, no ha tenido tanta repercusión a lo largo de la historia. Es por eso que he disfrutado mucho con la lectura de esta novela que, aunque al principio me costó un poco debido a la cantidad de personajes que se presentan, luego logró captar toda mi atención e interés por su desarrollo.Como ya he comentado anteriormente, a lo largo de las páginas de "Lo que esconden las olas" se van intercalando dos líneas argumentales, una en el pasado y otra en el presente. De esta manera, los capítulos en los que queda dividida la obra se alternan entre los años 1906 y 2006, indicándosenos este dato al comienzo de cada uno de ellos. Al contrario de lo que suele suceder en la mayoría de libros que utilizan esta estructura, desde mi punto de vista en Lo que esconden las olas ambos hilos argumentales se encuentran bastante equilibrados, resultando igualmente llamativos. Por otra parte, es una novela que va de menos a más, pues a medida que avanzamos en su desarrollo, a pesar de que el ritmo no sea demasiado intenso, la tensión se va incrementando y por lo tanto nuestro interés va en aumento, por lo que resulta complicado abandonar su lectura sin saber cuál va a ser el destino de los pasajeros o el resultado de la investigación que se está llevando a cabo en el presente.Respecto a la narración, Emma Lira hace uso de una prosa directa, cuidada, ágil y envolvente que modifica y adapta a cada época, resultando accesible y fácil de leer. Mientras que los capítulos que transcurren en el año 2006 están relatados en primera persona por Sandro, cuando nos trasladamos al pasado encontramos una serie de capítulos también en primera persona pero en general es un narrador omnisciente el empleado por la autora, permitiéndonos así acceder a lo que está sucediendo en todas las zonas del barco ya que en este año 1906 nos vamos a encontrar con una trama coral, en la que diferentes personajes comparten protagonismo, siendo igualmente relevantes sus historias.Es amplia la galería de personajes que encontramos a lo largo de las páginas de Lo que esconden las olas y al principio fue uno de los puntos que ralentizó un tanto mi lectura, aunque es un obstáculo que se salva rápidamente. En cuestión de trazado, los personajes que protagonizan la trama del presente cuentan con perfiles más definidos y profundos, pues el desarrollo de esta línea argumental así lo requiere, mientras que respecto a los del pasado únicamente nos interesa conocer su implicación en los hechos que están viviendo, por lo que aparecen perfilados en su justo detalle para saber quién es quien e identificar su papel dentro de la historia. En esta línea argumental del pasado, como señalaba anteriormente, nos encontramos con una estructura coral y así son varias las historias personales que se van entrecruzando, estando protagonizadas por diversas figuras entre las que se entremezclan los personajes reales con los ficticios y que van desde un cónsul hasta una cupletista, pasando por monjes benedictinos, anarquistas o el mismo capitán del barco. Por el contrario, la historia del presente está protagonizada por Sandro, a quien vamos descubriendo a través de un relato en el que pone de manifiesto tanto los avances que siguen en la investigación y todos los sucesos relacionados con ella, como su evolución a nivel personal, pues la narración en primera persona hace que pueda compartir con nosotros sus pensamientos, sentimientos y emociones.Faro Cabo de Palos ©
Uno de los aspectos que más he disfrutado en la lectura de Lo que esconden las olas es todo lo vinculado con la historia del Sirio, vapor italiano que en el año 1906 cubría la ruta Génova-Buenos Aires, naufragando frente a las costas de Cabo de Palos. A través de la narración de lo sucedido a bordo del barco, Emma Lira nos permite convertirnos en un pasajero más y ser testigos del drama que se vivió a bordo, compartiendo con los pasajeros los momentos más críticos, el pánico, las diferentes reacciones o los sentimientos y emociones experimentados, además de aportar datos sobre la evolución que siguió el naufragio. Pero no solo participaremos en este, sino que también viviremos esta tragedia desde la perspectiva de las personas que tomaron parte en él activamente prestando su ayuda en las labores de rescate de los náufragos, como otros navíos que fueron testigos de la catástrofe y sobre todo los pescadores de Cabo de Palos.Como os decía, a pesar de estar considerada la mayor tragedia de la marina civil en aguas españolas, no había oído hablar anteriormente de este suceso, por lo que me ha resultado muy interesante adentrarme en su historia y conocer los diversos detalles que rodearon al naufragio. Emma Lira utiliza como base estos hechos para desarrollar una novela en la que realidad y ficción se entremezclan, dando como resultado una lectura que despierta el interés del lector por conocer toda la información relacionada con esta tragedia, pero al mismo tiempo resulta sumamente entretenida, ya que cuenta con las suficientes dosis de suspense y tensión para que sea difícil abandonar su lectura. Creo que esta combinación de elementos es todo un acierto ya que permite que un amplio número de lectores puedan disfrutar de esta obra, en la que se conjugan de una forma equilibrada los hechos históricos con el misterio, la intriga, las aventuras e incluso el romance.Llegados a este punto, es evidente que la lectura de "Lo que esconden las olas" me ha resultado de lo más interesante y os la recomiendo sin ninguna duda. Una obra que combina realidad con ficción, basada en un acontecimiento histórico que pienso que no es demasiado conocido, y que conjuga con habilidad diversos elementos, dando como resultado un historia atractiva y emocionante que merece la pena descubrir.Si te ha gustado mi reseña, puedes comprar Lo que esconden las olas a través de los siguientes enlaces:Gracias a la autora y a la editorial por facilitarme el ejemplar para su reseña