Lo que hay en común
Tenemos la tendencia a despreciar lo que no es nuevo, moderno. Lo que tiene más de dos años está caduco y no sirve para nada, descartamos todo el conocimiento que llevó a ese descubrimiento, la tecnología, la ciencia y la experiencia que nos ha dado. El argumento de es viejo y por lo tanto es malo, es una especie de dogma en nuestros días.
Esta tendencia a renegar del ayer por buscar un mañana mejor olvidando que vivimos en el presente nos obliga a reinventar la rueda cada dos días. Tecnología que existe y funciona es descartada y se reinventa de nuevo desde cero con mayores costes de I+D para obtener un producto que realiza las mismas funciones y con el mismo coste, cuando habría sido más inteligente reutilizar lo que ya funciona, adaptarlo y modernizarlo, para obtener una mejor calidad y un margen más aceptable de producción y ventas.
Es como si renegáramos de los orígenes de la música, el rock and roll no se puede entender sin el blues, el pop sin los Beatles o los Beach Boys y así con todos los géneros musicales. Se empieza en un género y se evoluciona hasta llegar a una nueva categoría, y de esta se alcanza otra. Todos sin excepción viven y comparten la inspiración de artistas del pasado para crear su música del presente.
¿Porqué no ocurre esto en el mundo empresarial? ¿Porqué hemos de volver a inventar la sopa de ajo?
Película: It Might Get Loud
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