Fotografía de Eugene Smith "Tomoko Uemura en su baño" 1972
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) dependiente del ministerio de Sanidad, acaba de recomendar que las embarazadas, las madres que ejerzan la lactancia materna y los niños menores de 3 años no consuman acelgas ni espinacas por el riesgo de metahemoglobinemia, pero lo que realmente ha desatado la polémica ha sido la recomendación de no consumir atún rojo, pez espado, tiburón y lucio por el riesgo de intoxicación por mercurio, o consumirlo de forma muy reducida. Existe un estudio de 2003 donde se alerta de los elevados niveles de este metal pesado tóxico en estas especies marinas.De las polémicas comerciales no voy a hablar, sino de la Historia de la Medicina, y de los errores que se olvidan para volver a caer en ellos.
Está fuera de toda duda que el mercurio es tóxico para el ser humano, provocando diferentes tipos de patologías, según cómo sea la exposición (inhalada, ingerida,etc) y su duración. Para interesados busquen qué es el "azogue" y por qué existe la figura del "sombrerero loco". Yo he tenido la desgracia de ver 4 niños afectados por mercurio, falleciendo uno de ellos.
Esta situación me recuerda a la enfermedad de Minamata.
Minamata es una ciudad del sur de Japón, de unos 30000 habitantes. Tiene una bahía del mismo nombre, bañada por el mar de Yatsushiro. En los años 50 del siglo pasado empezaron a diagnosticarse casos neurológicos abigarrados con ataxia, alteraciones de la sensibilidad, alteraciones visuales y auditivas y en algunos casos la muerte. Inicialmente se sospechó una causa infecciosa y se mantuvieron en aislamiento. Estos síntomas también se detectaron en algunos animales, como en los gatos, donde fueron frecuentes las convulsiones llegando a llamarse la "cat dancing disease". A mediados de los años 60, ya había más de 100 muertos y más de 400 afectados, habiendo hijos de madre clínicamente normales con grandes afectaciones neurológicas, especialmente parálisis cerebral , que inicialmente no se relacionó. Esa conexión entre gatos y personas fue la que condujo a creer que la base era una intoxicación mediada por los alimentos, en este caso el pescado y el marisco, que era la dieta más común en esa zona geográfica.
A finales de los 60 Japón confirmó que todos los afectados se debían a la ingestión de pescado y marisco contaminado con mercurio orgánico de la bahía de Minamata y de un río cercano, cuyo origen eran los vertidos de una empresa química de la zona, Chisso. Era la fábrica química más avanzada de Japón.En el año 2001 eran ya casi 3000 los afectados por la enfermedad de Minamata, casi todos de esa zona geográfica, con más de1500 fallecidos.En enfermos la concentración máxima encontrada fue de 705 ppm, en asintomáticos de 191 ppm. La concentración en el resto de Japón era de 4ppm.
En el año 1965, otra empresa en Nigata, provocó un brote similar en esa ciudad por contaminación del agua y del pescado de río.
No olvidemos lo que el pescado ya nos ha enseñado. Contaminamos el planeta y la culpa no es del atún. Es demasiado grave para permitírnoslo
Vídeo con enfermos de la enfermedad de Minamata
Algunos archivos si quieres saber másMinamata Disease Archives
Enfermedad de Minamata gobierno de JapónPost original de www.laincubadora.blogspot.com