Los Boston Celtics son parte fundamental de la historia de la NBA. Más allá de sus jugadores legendarios, de su excepcional palmares e incluso de ser uno de los equipos fundadores de la competición estadounidense, los Orgullosos verdes de Massachusetts han logrado ser uno de los equipos icónicos de la historia del baloncesto.
El mítico ambiente del Boston Garden, el inconfundible verde de sus camisetas, los puros de Red Auerbach, sus leyendas como Bob Cousy, Bill Russell o Larry Bird, o su mágico Leprechaun ... han hecho de la historia de los Celtics, un relato esencial para comprender la historia del crecimiento y expansión del baloncesto.
Realmente, cuando se habla de los Celtics, se podría resumir su historia en un equipo que lo ha ganado básicamente todo, aunque siempre existe una excepción y, en el caso de los de Boston, lo que les falta ganar todavía a día de hoy, es un reconocimiento a nivel de jugador, que puede ser muy significativo para comprender la historia de los Celtics.
En los más de 75 años de historia de los Boston Celtics, nunca han tenido un jugador que fuera el máximo anotador de la liga.
Este hecho podría ser más o menos común en cualquier equipo de la NBA, pero es particularmente curioso en un equipo que lo ha ganado todo y, además, que lo ha ganado muchas veces.
La historia de los Celtics ha sido escrita por algunos de los mejores jugadores de todos los tiempos, lo cual queda fácilmente reflejado con el dato de que los de Boston, es el equipo que más MVP ha tenido en la historia de la NBA con un total de 10 (1 Bob Cousy, 5 Bill Russell, 3 Larry Bird y 1 Dave Cowens).
Han tenido máximos reboteadores y lideres en asistencias, pero nunca un máximo anotador de temporada regular como por ejemplo si han tenido otros históricos equipos como los Warriors, Bulls, Lakers, Spurs o 76ers.
Probablemente el concepto de juego de Red Auerbach y la importancia de lo colectivo sobre lo individual, e incluso de lo defensivo sobre lo ofensivo, hizo que los Celtics en sus mejores años en la NBA, nunca tuvieran un jugador que fuera excepcionalmente productivo en ataque ya que, ¿para qué tener un único jugador, cuando varios te pueden proporcionar el mismo o, incluso, un mejor resultado?.