Lo que tapa De Gea

Si ya fue una de las revelaciones en la pasada campaña, en el inicio de ésta, el canterano atlético David De Gea se ha erigido como el portero más en forma de nuestro fútbol. Y se lo merece, porque cuando estaba a punto de ser hombre importante en el primer equipo rojiblanco vio como el club traía al no menos prometedor Asenjo. Lejos de pensar en una cesión en busca de minutos, se quedó y gracias a su trabajo su nombre está en la cabeza de Vicente Del Bosque. Pero una realidad está siendo opacada por el momento de forma del joven meta. Y es la fragilidad que actualmente demuestra el Atlético en defensa. Vale que han sido un par de partidos ante rivales duros (Barça y Valencia) y que los porteros también juegan, pero si los colchoneros quieren ser una opción real a la bicefalia liguera y reeditar su triunfos europeos, tiene que mejorar mucho para que De Gea no sea su jugador más destacado del partido. Está bien que De Gea pare, pero estaría mejor (por el rendimiento de su equipo) que no lo hiciera tan a menudo.