El apocalíptico tema compuesto por Joe Strummer y Mick Jones será el reclamo publicitario de los Juegos Olímpicos que tendrán lugar en la capital inglesa.
La portada del disco, 'London calling', de The Clash, y el símbolo de las Olimpiadas de Londres 2012.
London calling, la mítica canción compuesta en 1979 por el grupo punk más político de Reino Unido, The Clash, es la escogida para la campaña publicitaria de las Olimpiadas de Londres 2012. El tema será utilizado en una serie de anuncios que se emitirán en unos días y constituye la sintonía de la cuenta atrás hasta el 27 de julio de 2012, día en el que comienzan los Juegos Olímpicos. Este es un vídeo de la canción de The Clash:
“London calling es el ejemplo clásico de canción que se ha vuelto tan familiar que ha perdido su significado original”, explica hoy (2 de agosto) el periodista especializado Marcus Gray en el portal británico de noticias BBC. Pero, ¿cuál es la verdadera historia de este tema punk? “London calling, el aviso de alarma de los noticiarios de la BBC durante la Segunda Guerra Mundial, fue la llamada de socorro de The Clash desde el corazón de la oscuridad”, explicábamos en la lista de ROLLING STONE de Las 500 mejores canciones de todos los tiempos, en la que ocupa el puesto número 15. Cuando grabaron la canción, para su tercer disco, The Clash estaban sin mánager y casi ahogados en las deudas. A su alrededor, su país pasaba por una crisis durísima: comienzo de la ultraconservadora era Thatcher, conflictos raciales, desempleo, abuso generalizado de las drogas… “Nos daba la sensación de que estábamos en las últimas”, dijo Joe Strummer, “y no había nadie para ayudarnos”. Strummer y el guitarrista Mick Jones canalizaron su preocupación en una canción que sonaba como si The Clash hubieran entrado en la batalla. […] Sobre ese sonido urgente , Strummer aullaba a propósito de desastres reales o imaginarios. Los versos “London is drowing/ And I live by the river [Londres se inunda/y vivo al lado del río], se basaba en el folclore popular. “Bromeábamos con que si el Támesis llegaba a desbordarse, moriríamos todos”, contó Jones, “menos Strummer, que por entonces vivía en un edificio alto”.
Publicado 19/08/2011 en Rolling Stone