¿Os acordáis del post en que reflexionaba y os pedía vuestra opinión sobre los estilos juveniles o clásicos? Precisamente a raíz de outfits como el que vemos hoy surgió la idea de abrir el debate. Es bastante clásico en el sentido en que combina una falda lápiz negra con un sencillo jersey blanco. Para dar un giro a la propuesta de vestir, y también porque me apetecía mucho estrenar algunos de los productos que me regaló Iris, surge el look metálico con que combino hoy las prendas en el post.
Vamos a verlo.
1. El outfit
Empiezo por la ropa porque en este caso y como os decía, es del binomio blanco/negro y del intento de combinar en maquillaje con algo diferente (más allá del negro o del pin up) de dónde surge toda la idea en general.
Las pasadas fiestas aproveché un regalito en forma de dinero para hacerme con este conjunto. Es de Cortefiel, donde como ya os he dicho alguna vez, hace años ni miraba por pensar que la ropa era demasiado seria y, conforme cumplo años…más me va gustando (jajaja).
Lo primero que vi fue la falda, que me gustó porque es un corte que me favorece pero además tiene el detalle de las cremalleras doradas que le da un toque distinto. Es, además, una prenda muy cómoda de llevar y que se ciñe al talle de una manera favorecedora.
Después llegó el jersey, de una manera curiosa: unos días antes había estado buscando un jersey blanco en Mango, pero todos los que vi eran gordísimos y con el típico corte muy ancho pero muy corto (un estilo al mostaza que les enseñé aquí). En este caso, yo lo quería para vestir y no me convencía ese diseño. Así que cuando vi éste, fino y entallado y con la gracia del dorado en el cuello, me gustó mucho.
Lo he combinado como ven, con medias caladas y botines.
2. El look
Como os comentaba, mi idea era una propuesta que combinase pero que no me dejase la sensación de “lo mismo de siempre para un B/N”. Aprovechando la excusa del dorado en los apliques de ambas prendas, mezclé diferentes tonos metálicos para el look de ojos.
En el lagrimal y el primer tercio del ojo tienen un toque de plata gracias a la sombra en crema de Bourjois.
A continuación apliqué un dorado muy cálido de la paleta de neutros de Deliplus y lo maticé en la cuenca con el marrón más oscuro de la misma paleta, que tiene cierto acabado cobrizo y por eso combina tan bien en esta propuesta metálica.
Como siempre, hasta el hueso de la ceja apliqué una sombra vainilla mate y delineé de negro. A ras de pestañas inferiores difuminé mi lápiz negro también de Bourjois con una sombra acero (gris oscuro) de la misma paleta que venimos viendo.
Finalmente, apliqué máscara y arreglé mis cejas.
Me apeteció un toque cálido para contrastar con los fríos metálicos y para eso utilicé el colorete en stick de Isadora “Love in Río”. Lo llevo también en los labios, con un toque de cacao transparente y fíjense que queda muy bonito y favorecedor.
La piel, como siempre, va con la base y corretor de Clarins y sellada con los polvos de L’oreal. Para contornear e iluminar, el consabido set de Isadora.
En la imagen, algunos de los productos mencionados:
3. La manicura
Muy sencilla de hacer (tiempo no me sobraba) pero llamativa
gracias al uso de nuevo de estos tonos (blanco, negro, metálicos). Como veis,
todas las uñas salvo el anular van en negro con el fantástico tono deep Black Chief de Douglas. En el
anular, el blanco es de Isadora – en realidad un esmalte para la francesa, con
buena cobertura- .
La decoración es, como les digo, sencilla pero no pasa
desapercibida por el contraste de color. En la uña blanca apliqué rhinestones
dorados, y en las otras color blanco/plateado.
¿Soléis optar por looks metálicos cuando van de blanco y
negro?
¡Espero que os haya gustado!
BESOS!