Con Zara me pasa al contrario que con otras tiendas: se me quitan las ganas de entrar si consulto únicamente la web. Es decir, cuando veo los lookbooks y catálogos, literalmente me quedo helada, fría, absorta. Y es que, los escenarios son magníficos, pero las prendas escogidas no siempre son las mejores. En este caso podemos ver 'ropajes' anchos y poco femeninos, figuras amorfas y aburridas y poca novedad. Se salvan los tonos pink e intentos románticos. Porque el resto y lo siento mucho por la crítica pero...prefiero verlo en la tienda.
Menos mal que TRF se salva de mi quema personal de hoy, ofreciendo realismo, aires casual y deportivos y escenarios cálidos y veraces. Me quedo con el look de cuello de cisne rosa palo con falda corta estampada. Yo ya puedo dormir esta noche ;b