Antes de que acabase el año, estaba con nuestro amigo mutuo, Ruperto, enseñándole lo guay que nos ha quedado nuestra nueva aplicación ERP para pymes, en la empresa de servicios informáticos con la que compagino mi pasión por el Coaching.
No sé cómo derivo nuestra conversación en los síndromes del mundo empresarial y nos pusimos, Ruperto y yo, a investigar sobre ello y lo quería compartir contigo.
En el mundo empresarial existen síndromes incapacitantes que afectan a empleados y trabajadores de todas las jerarquías. Los altos puestos jerárquicos y los trabajadores de bajo nivel están cada día más expuestos a padecer este tipo de síndromes debido a una comunicación ineficaz y a la competencia inadecuada. A continuación, te presento un resumen de los casos más habituales:
Síndrome de Burnout: Es también llamado el síndrome del trabajador quemado y se presenta en la mayoría de los casos en empleados que no tienen cargos gerenciales. Se produce por el estrés causado por el trabajo y se caracteriza por la presencia de ansiedad y depresión.
Síndrome de Procusto: Afecta principalmente a quienes tienen cargos gerenciales que pueden sentirse amenazados por el buen desempeño de algunos empleados. Se caracteriza por el maltrato permanente hacia los empleados más sobresalientes, lo que desvía por completo los objetivos organizacionales y puede conducir a la fuga de talentos.
Síndrome de Peter Pan: Se presenta en aquellas empresas que se niegan a crecer, a aceptar las nuevas oportunidades que ofrece el desarrollo tecnológico y las ventajas de crecimiento que se pueden obtener adecuando sus procesos productivos, gerenciales y de comercialización a la nueva era digital.
Síndrome del Superhéroe: Se presenta en aquellos líderes que no son capaces de delegar funciones en sus subordinados y quieren tenerlo todo bajo control negando la oportunidad de desarrollar habilidades y destrezas y a poner en marcha proyectos propios que pueden favorecer el crecimiento organizacional.
Síndrome de Abstinencia de Ejecutivos: Afecta a aquellos ejecutivos que se niegan a tomar un descanso o un período vacacional, ya que, se consideran vitales para el funcionamiento de la empresa. Cuando son forzados a hacerlos llegan a presentar síntomas físicos y emocionales.
Síndrome del Fundador: Algunas empresas pueden verse afectadas con este síndrome cuando el fundador de la misma es considerado el único capaz de conducirla y no es capaz de formar un equipo con colaboradores que aporten sus saberes y talentos para su buen funcionamiento.
Síndrome del Impostor: Es un problema psicológico que afecta a aquellos que vienen en ascenso rápido y que no se sienten merecedores de su éxito. Tienden a subestimarse y a sentirse incapaces para algunas tareas y funciones.
Efecto Dunning – Kruger: Se presenta en los líderes incapaces de reconocer sus fallas e incompetencias. Tienen un desempeño pobre y muy bajo rendimiento pero se consideran que están por encima de lo esperado. Se evidencia en estos casos una incapacidad de autocrítica que afecta el rendimiento laboral.
Síndrome de Hamlet: Se presenta en los cargos de más alto mando en las organizaciones, especialmente en las que cuentan con una nómina extensa. Afecta la capacidad de mando del jefe, frenándolo en la toma de tomar decisiones.
Síndrome de la Persona Alfa: Se presenta en los subordinados que persiguen permanentemente el liderazgo y el logro, lo cual puede llegar a ser negativo cuando se incurre en malos tratos, atropellos y violencia con sus compañeros de trabajo.
Aparte de los mencionados, nos encontramos con muchos otros casos como el síndrome del código de Hammurabi en el que se obstaculiza la comunicación empresarial por el establecimiento de normas de altísima complejidad que afectan la productividad y la competitividad de los propios trabajadores; el síndrome de Estocolmo Empresarial en el que el trabajador se siente emocionalmente vinculado a un empleo que no satisface sus necesidades laborales o económicas o que está siendo subestimado o explotado
Finalmente, podemos mencionar el síndrome de la Plena Actividad en el que no se dedica tiempo a la planeación estratégica sino que se aumenta el tiempo de trabajo en el área productiva; síndrome de oficina enferma que afecta directamente la salud física de los empleados por un ambiente inadecuado, mal ventilado, con ruido extremo o mal iluminado y síndrome del no inventado aquí que se caracteriza por el rechazo frontal a conocimientos, productos y soluciones ajenas que puede llevar al desmejoramiento de los procesos productivos, de comercialización y gerencia de las empresas al negarse a aceptar el conocimiento del entorno exterior.
Este articulo Los 14 síndromes más típicos del mundo empresarial aparece en El arte del coaching.