Ya se les dio a los dirigentes del PRD lo que querían. Con la celebración, por parte separada, de las reuniones del CEN de hoy del PRD se afirma la división de este partido. El PRD de Miguel Vargas Maldonado y el PRD de Hipólito Mejía han asesinado la última esperanza de equilibrio democrático. Cada grupo armo su directiva y cada grupo se esfuerza por hundirse más en el hoyo que ellos cavaron.El PRD ha hecho lo que ni Trujillo, ni Balaguer consiguieron: debilitarse. Ahora con los aliados de Vargas Maldonado pidiendo las cabezas de quienes apoyaron al grupo de Mejía; se agrava la situación. Recordemos que toda organización que se divide esta destinara a desaparecer. El imperio romano es un ejemplo elocuente de esto que afirmamos. La próxima etapa será una “guerra civil” para ver quienes se quedan con los colores del Partido. ¡Felicidades perredeistas! ¡Pasaron la materia como joder un partido en poco tiempo!
Esperemos que se arme una revolución interna, de los líderes emergentes que les duela su legado y detengan la desaparición del Partido Blanco. Sino… ¡El país seguirá morado por muuuuucho tiempo!