Que los videojuegos manipulan nuestros sentimientos no es una novedad: con algunos reímos, otros nos arrancan una lagrimita y otros nos hacen gritar como niñitas asustadas. Posiblemente, este último sentimiento es el más primario que podemos “disfrutar” en un videojuego, por lo menos el más sincero.
De lo que voy a hablar hoy no es de los sustos que me he pegado jugando, sino de algo mucho más profundo, hablaré de esos momentos de terror psicológico que producen algunas escenas, que hacen que se te disparen los niveles de adrenalina y que tus manos suden cual cataratas del Niágara. De todos esos momentos, estos son mis 5 favoritos.
Dead Space, “Echando una cabezadita”
Quien haya jugado al primer Dead Space, el bueno, el que da miedillo de veras, recordará esta escena, pues se queda grabada a fuego.Pongámonos en situación: estás solo en una nave espacial repleta de mutantes psicópatas que te buscan para formar parte de su selecta cadena alimenticia. Finalmente llegas a una zona aparentemente tranquila, pero a o lejos oyes un golpeteo constante (pum, pum), por el estéreo sabes que viene de tu derecha (pum, pum), detrás de una puerta (pum, pum). La abres (no te queda otra) y aparece un hombre de espaldas despellejado, golpeándose la cabeza contra la pared.
Pum, pum, pum… CRACK. El muy campeón se ha partido la cabeza contra el muro, se desmorona y nosotros hemos asistido a una de las mejores escenas de la historia de los videojuegos de terror.
Endless Ocean, “Lo veo negro”
Pues sí, posiblemente uno de los juegos más relajantes a los que he jugado tiene el mérito de también haberme puesto los pelos de punta.El fondo marino me da pavor, el no saber qué te puedes encontrar detrás de esa roca o la inmensa desventaja en la que te encuentras en ese medio no ayuda. Supongo que por eso, pese a ser un juego de lo más inofensivo, las inmersiones en la zona abisal del Endless Ocean siempre me provocan un subidón de adrenalina.
Sabes que no te van a atacar, pues no hay barra de vida que perder, pero a medida que te te sumerges y la oscuridad se va haciendo absoluta, se acaban las bromas, el ambiente se vuelve hostil. Una forma gigantesca se acerca, es un cachalote. Unos tentáculos aparecen a tu lado, un calamar gigante (juas). Finalmente llegas al fondo, y lo que te encuentras es un cementerio de ballenas lleno de bichos que parecen sacados de El octavo pasajero. Todo muy acogedor.
Resident Evil Revelations, “Mayday, mayday…”
Que Resident Evil Revelations es uno de los mejores Residents hasta la fecha debería saberlo todo el mundo, aunque los zombies hayan sido substituidos por una especie de cangrejos humanoides, este juego regresa a los orígenes de la saga con una atmosfera cargada, falta de munición y momentos que te los ponen de corbata.Una de sus escenas más ilustres tiene lugar cerca de la sala de mandos del ferry Queen Zenobia, donde una voz suplica una y otra vez “Mayday, mayday, aquí el Queen Zenobia, llamada de emergencia…”, la voz tiene un deje raro, pero como buen STARS debes ir a investigar. La voz sale de detrás de una puerta cerrada con cadenas y candado, a la que golpean desde dentro. Piden ayuda, habrá que abrir esa puerta, ¿no?
Shadow of the Colossus, “Hydrus, el coloso submarino”
Como ya comentaba antes, el fondo marino me da mal rollito del bueno, pero no sólo por eso la lucha contra Hydrus hizo que me pensara dos veces lo de pegarme el chapuzón, sino porque éste era el único coloso que no veías.Todos los demás colosos aparecen con una espectacular cinemático donde puedes verlo en todo su esplendor. Hydrus no, la carta de presentación de éste se basa en una sombra gigantesca bajo las oscuras aguas, decorada con unos mortales generadores eléctricos. Y así, sin más, te tienes que tirar al agua, agarrar como puedas al mal bicho del demonio, clavarle tu espada/punzón y no ahogarte en el intento.
Amnesia: The Dark Descent, “Sustos, stahp pls”
Acabaríamos antes si hablara de lo que NO da miedo en Amnesia. En uno de los juegos que más improperios he gritado, tu personaje no tiene ni un mísero palo con que defenderse, mientras que los monstruos que van a por ti con muy mala leche, así que lo único que te queda es esconderte. Gran plan para un viernes por la tarde.
De lo que he jugado, me quedo con el puzzle de abrir la puerta en la zona inundada. Abrir una puerta, fácil. Con agua hasta la cintura, sobreviviré. Acechado por un monstruo invisible que va a por ti cuando tocas el agua, del que sólo ves las salpicaduras que provoca al acercarse y al que tienes que despistar lanzándole trozos de cuerpo humano que flotan por ahí… Pues mejor me voy a ver Bambi 2.
Y hasta aquí mi pequeño podio de los momentos en los que peor lo he pasado. Y vosotros, ¿tenéis algún momento tenso digno de recordar?