de Toni Hill.
Título: Los ángeles de hieloAutor: Toni HillEditorial: Grijalbo, 216Páginas: 464
Resumen oficial.
«En esta historia penetraremos en los más oscuros recovecos del alma humana, en las atrocidades que pueden cometer los seres atormentados por la venganza y el odio.»Tanto los vivos como los muertos.»
Barcelona, 1916. A sus veintisiete años, Frederic Mayol ha dejado atrás una vida cómoda en la esplendorosa Viena y la traumática participación en una guerra que sigue asolando Europa. Psiquiatra y seguidor de las teorías psicoanalíticas, se enfrenta a su futuro puesto en un sanatorio ubicado en un tranquilo pueblo pesquero cercano a Barcelona, un enclave perfecto para superar los horrores vividos en el frente.
Pero la clínica y sus alrededores no resultan ser tan idílicos como pensaba. Las sombras de un siniestro pasado se ciernen sobre los ángeles que decoran la fachada del edificio, como si quisieran revivir los acontecimientos que sucedieron en la casa siete años atrás, cuando el lugar era un prestigioso internado para jovencitas de buena familia que cerró sus puertas después de un trágico incendio.
Atrapado entre el anhelo de desvelar el misterio que se esconde entre los muros del caserón y el amor que siente por Blanca, una de las antiguas alumnas del colegio, Frederic deberá enfrentarse a una perversa historia de obsesiones y venganzas hasta llegar a una revelación tan sorprendente como desoladora.
Porque la verdad, aunque necesaria, no siempre supone una liberación; a veces incluso puede convertirse en una nueva condena.
Impresión personal.
A pesar de que el autor de esta novela es muy conocido por los libros protagonizados por el inspector Héctor Salgado, para mi éste ha sido mi primer acercamiento a su obra, una obra auto-conclusiva que por su temática no parece que tenga mucho que ver con su famosa trilogía policíaca. Lo cierto, es que la novela me ha encantado, me ha inquietado y creo que será difícil que me olvide de ella precisamente por esa inquietud que me ha ido provocando a medida que avanzaba en su lectura.
Los ángeles de hielo es una novela negra donde el mal lo impregna todo con un halo de misterio y, diría, de terror, que hace que desde la ambientación, los personajes y la propia historia que se va desarrollando te mantengas alerta en todo momento sabiendo que tarde o temprano te vas a llevar un buen "susto" y a la vez, deseando que llegue ese momento y averiguar el desenlace final. En un entorno en dos épocas diferentes, mismo edificio pero distintas personas relacionadas de alguna manera con el desarrollo mental, moviéndose en un espacio que se te antoja amenazante donde los ángeles pueden ser en cualquier momento macabras gárgolas, te produce, en muchas ocasiones, una sensación de asfixia difícil de explicar. De cabecera, para más "inri", el libro de Jane Eyre donde la inocencia y la bondad de Jane se cruza con la enfermedad mental y la maldad de la esposa de su amado. Todo un compendio de elementos que confluyen para hacerte pasar momentos de gran inquietud y, sobre todo, de duda sobre todos los que participan.
La novela se desarrolla en Barcelona y en un pequeño pueblo costero cercano donde se enclava el edificio donde trabaja Frederic Mayol, joven psiquiatra que ha regresado recientemente de la I Guerra Mundial por haber sido herido. Por tanto, esta parte de la historia se desarrolla en 1916 cuando el protagonista principal regresa a la ciudad condal y se instala en casa de su padre y posteriormente, en la localidad cercana al sanatorio mental. Unos años antes, en 1908, el edificio fue un antiguo colegio para señoritas de clase alta, salvo algunas "becarias", donde se pretende que estas nuevas generaciones de mujeres sean algo más que tímidas esposas predestinadas a no pensar ni actuar a capricho de los usos y las costumbres sociales. De ahí, el ejemplo de Jane Eyre, con el que la directora del colegio Agueda Sanmartín, pretende inculcarles a las mayores el espíritu de lucha y superación de la protagonista frente a las adversidades de su época.
Entre ellos, todo un elenco de personajes de una y otra época que juegan en torno a la historia de ese viejo edificio. Encontraremos antiguas alumnas del colegio de señoritas que van muriendo de forma misteriosa, profesoras y amas de llave totalmente fieles y conocedoras de grandes secretos, enfermos mentales que no lo son tanto a veces, investigadores fuera de lo común y personajes propios de una época convulsa donde los ricos y acaudalados empiezan a notar el despunte del descontento de las clases sociales menos favorecidas mientras siguen con sus frivolidades y un estilo de vida abocado a la extinción. Entre medias, un narrador que de vez en cuando aparece para aclarar algunos puntos, el doctor Freixas que es quien desde el principio inicia el relato de la historia de lo que aconteció en una y otra época en ese edificio.
La verdad es que el autor ha conseguido hilar una historia sumamente compleja, con muchos personajes que aparentemente pareciera que no tienen relación alguna y que, sin embargo, y con ritmo pausado vemos, cuando el autor lo cree oportuno, que existe una relación entre todos ellos; que todos de alguna manera han intervenido para que los hechos que ocurren en pasado y presente sean los que son. Secretos e intriga, juramentos llenos de miedo, silencios que ocultan el mal en cada rincón y hasta donde pueden llegar las mentes trastornadas. Y todo ello rodeado de un ambiente opresivo que la descripción del edificio te transmite en cada sala y en cada pasillo, un pasillo en el que retumban risas estridentes de locura que te hacen estremecer.
En conclusión, si Jane Eyre y Rebeca son para mi libros de cabecera precisamente por la creación de esos ambientes llenos de misterio donde ronda la maldad a tu alrededor sin que consigas verla salvo cuando la tienes encima, con esta novela de Toni Hill, yo he tenido esa misma sensación claustrofóbica que te produce un ambiente donde reconoces que algo malo está pasando a tu alrededor y no sabes si quieres verlo o no. Una novela negra con tintes de terror que a mi me ha encantado y me ha causado sensación por la inquietud que me ha provocado. Totalmente recomendable.