Los atributos femeninos de Madame Le Fèvre de Caumartin...

...adornan nuestra portada estos días. Nuevamente, un cuadro de Jean-Marc Nattier (1685-1766), Madame Le Fèvre de Caumartin como Hebe (1753) nos muestra como sugerente adorno en el pecho una rosa. Ver Retrato de Manon Balletti
Era habitual en Nattier el retratar personajes preminentes de la corte francesa de Luis XV interpretando personajes de la mitología griega. En este caso, Mme. Le Fèvre es Hebe, diosa de la juventud, que repartía el néctar entre el resto de dioses. Este tipo de retratos le dieron fama y dinero, ya que muchas de sus mitologías se utilizaban posteriormente en grabados por los que percibía ingresos.
Pasaron décadas durante las cuales Nattier tuvo una gran fama como pintor de la corte. Casi al final de su vida, aparecieron algunas voces críticas ridiculizando este tipo de cuadros. En esto tuvo que ver no sólo el cambio de modas, sino también el cambio social que llevaría a una corte decadente hacia la Revolución de 1789.

El cuadro tiene una sencilla composición triangular (cabeza-manos-águila): Hebe llenando una copa de néctar, a la derecha, Zeus representado por ún águila. Se repite la tónica habitual en los retratos de Nattier: uso preminente de colores fríos, como es el azul del ropaje, y unas encarnaciones algo sonrosadas, con cierto efecto de transparencia. Las crónicas indican que el pintor era capaz de sacar la parte más hermosa de sus retratados, sin necesidad de faltar a la verdad. El fondo es neutro, similar al retrato de Manon Balletti que ya habíamos analizado.
"Una rosa es una rosa es una rosa". Gertrude Stein.