Dentro de la limpieza de obra podemos tener distintos medios de atacar a la suciedad depositada a lo largo del tiempo y a la suciedad de obra. Ya hemos hablado de cepillos industriales y otros medios que nos permiten mantener y rehabilitar los elementos constructivos. Además de la limpieza de obra podemos plantearnos el uso de cepillos que hagan su función a lo largo de la vida del edificio.
En el artículo de hoy hablaremos de todos los tipos de cepillo que se encuentran dentro del ámbito de la construcción, como pueden ser los burletes que limpian los barridos de las puertas así como sus funciones, como la protección contra el paso del aire, insectos, etc.
Tipos de cepillos industriales
La clasificación que podemos hacer de los cepillos de limpieza podría ser la siguiente, teniendo en cuenta el momento de la obra en el que aparecen estos útiles.
Cepillos industriales
Cuando necesitamos utilizar un cepillo abrasivo sobre base metálica y fibra en acero, inox, latón o nylon abrasivo podemos recurrir a estas herramientas circulares, que de inicio son variadas y se utilizan fundamentalmente para quitar corrosiones, pinturas e imprimaciones para obtener superficies limpias. Aunque no solo eso, también son útiles para envejecer “aceleradamente” la madera marcando su veta.
A la hora de eliminar restos de cordones y puntos de soldadura se pueden acoplar a un talador, por ejemplo y además utilizarlos para alisar, desbarbar piezas de fundición y caucho-metal, matear y satinar. Las utilizdades diarias van más allá y estos cepillos se utilizan para limpiar los paneles de encofrado.
Los podemos incorporar a un taladro, pero de la misma manera podemos conectarlos a amoladoras angulares monomando, amoladoras angulares grandes, amoladoras neumáticas y máquinas estacionarias.
Cepillo plato
Cuando vamos a limpiar superficies planas, debemos de usar el cepillo plato de disco circular. Se suelen utilizar como complemento de herramientas motorizadas para desbarbar, deslizar, limpiar, quitar cordones de soldadura, pulir, consiguiendo finos acabados de superficies.
Son muy útiles en los casos en los que se trabaja con máquinas que arrancan viruta, como pueden ser las máquinas CNC o robots. Su función principal es el redondeo de bordes, acabado de superficies en piezas de precisión, desbarbado de perfiles de aluminio. Se utilizan también en piezas mecánicas como cárteres, componentes de válvulas, piñones, …
Cepillos de Protección
Cuando queremos trabajar con piezas delicadas y necesitamos tocar el suelo, apoyar, deslizar… y no resulta práctica una alfombra, podemos evitar los rozamientos y los arañazos si utilizamos cepillos de protección. Reducen en gran medida las piezas desechadas, evitan daños y mantienen la limpieza del material o del producto. Dependiendo de la calidad de las fibras se protegerán mejor las superficies durante la manipulación, el transporte, el deslizado, etc.
Además de en los propios transportes y en los puntos de colocación de determinadas piezas, este tipo de cepillos de protección se incluyen en mesas de trabajo. De esta manera se evitan daños por virutas o astillas.
Como se trata de placas a medida se pueden integrar fácilmente en las mesas y brazos de cualquier máquina de corte, plegadora o punzonadora de chapa.
Cepillos con función diaria
Una vez que el edificio está en uso también nos encontramos con cepillos, cuya función es la de mantener la limpieza evitando el paso de polvo e insectos a través. Un claro ejemplo son los burletes de las puertas, esos cepillos que se instalan bajo la carpintería, pero no son los únicos.
Los cepillos pasa cables se utilizan en muebles, armarios eléctricos, racks y suelos técnicos climatizados. Gracias a ellos podemos conseguir cerramientos altamente eficientes ya que se consigue una reducción de costes debido a la separación estricta del aire frío y caliente.
El cepillo que se utiliza en tira antiestática posibilita un alto grado de seguridad gracias a la derivación de tensión integrada. Desvía de forma controlada las tensiones y las cargas electrostáticas perturbadoras o dañinas localizadas en superficies mediante finísimas fibras a través de un cuerpo de aluminio a modo de pararrayos hacia una toma de tierra conectada.
Este tipo de cepillo tiene un ajuste sencillo mediante taladros longitudinales en los perfiles, que los hace fáciles de montar.
En el sector industrial se instalan en forma de rodillos otro tipo de cepillos cilíndricos que incluyen la pluma de avestruz debido a su gran carga electrostática atrae el polvo de las superficies. El polvo ionizado se adhiere al cepillo dejando las superficies sin ninguna mota de polvo.