¿Los Coches Voladores del Futuro son el Gran Salto en Transporte?

¿Los Coches Voladores del Futuro son Realmente el Próximo Gran Salto en Transporte?

¿Los Coches Voladores son el Verdadero Futuro de la Movilidad o Simplemente una Ilusión del Cine?

Los coches voladores del futuro se han posicionado siempre como el pináculo de la innovación en la movilidad, poblando la imaginación colectiva en series de ciencia ficción como «Los Supersónicos» o películas icónicas como «El Quinto Elemento», «Regreso al Futuro» y «Blade Runner». Pero ¿son realmente el futuro del transporte como lo pintan en Hollywood, o simplemente son un concepto fallido?

Coches Voladores: El Sueño de una Movilidad sin Ataduras

Los coches voladores tienen una larga historia, pero han enfrentado constantemente una amplia variedad de retos. Para responder a la pregunta anterior, primero tenemos que entender cómo se posicionan los coches voladores en el mundo del transporte. Cada vez que surge una nueva innovación en este ámbito, es esencial determinar qué problema resuelve.

En el caso de los coches voladores, ese problema es la congestión del tráfico en las vías públicas. Es fácil imaginar nuestro vehículo volando sobre un gran atasco para llegar a nuestro destino. Aquí radica el primer problema con los coches voladores. La infraestructura de transporte moderna ya puede hacer lo que se espera de ellos.

La Infraestructura Moderna de Transporte ya Cumple con lo Esperado de los Coches Voladores

Un argumento en contra de los coches voladores es que la infraestructura moderna ya resuelve el problema que se espera resolver con ellos. Neil deGrasse Tyson habló sobre este argumento cuando se invitó al podcast de Joe Rogan. Tyson argumentó que no necesitamos coches voladores porque los puentes, túneles y autopistas ya hacen lo que se supone que deben hacer: desviar el tráfico por encima o por debajo del tráfico existente.

Para visualizar esto, imaginemos un carril bloqueado por un coche lento. Para pasar al coche lento, puedes añadir carriles extras para evitarlo. Tyson llama a esto viaje en dos dimensiones: longitud y anchura. En algún momento, las carreteras bidimensionales se congestionarán o intersectarán con otras vías. Aquí es cuando querrás liberar el tráfico añadiendo una tercera dimensión: la altura. Esta tercera dimensión proviene de las autopistas elevadas que corren paralelas a las carreteras, o los puentes y túneles que pasan por encima o por debajo de las autopistas. Al igual que un coche volador, toda esta infraestructura hace que nuestros coches «vuelen» por encima del tráfico existente.

Además, Neil deGrasse Tyson también argumentó que los sistemas modernos de ferrocarril abordan los mismos problemas que se pretende resolver con los coches voladores. Los metros y otros sistemas de tren pueden moverse por encima o por debajo del tráfico como un coche volador. Ayudan a llegar a tu destino de manera más rápida y eficiente que conduciendo.

Cuando los coches voladores se conviertan en corrientes, simplemente conducirán a más atascos en el aire. Al igual que los metros, ferrocarriles, túneles y puentes, una vez que las personas adopten un nuevo modo de transporte, lo utilizarán por miles. Cuando lo hagan, los coches voladores simplemente trasladarán el tráfico pesado de las carreteras al aire. Cuando eso ocurra, no hay solución imaginable, porque Tyson argumentó que es imposible e incomprensible añadir una cuarta dimensión.

¿Son los Helicópteros los Verdaderos Coches Voladores del Futuro?

Puede que la idea de que los coches voladores sean autopistas elevadas y sistemas ferroviarios sea anticlimática para muchas personas. Pero el futuro de los coches voladores aún no ha muerto. Varias empresas ya han invertido en la tecnología que hará realidad los vehículos voladores. Su visión de los coches voladores es también por qué Neil deGrasse Tyson argumenta que los coches voladores ya existen: se llaman helicópteros.

Los vehículos de despegue y aterrizaje vertical (VTOL), como los helicópteros y, en cierta medida, los drones, son las opciones más cercanas que tenemos para hacer realidad los coches voladores. Sin embargo, la única forma de hacerlos efectivos y eficientes como medio de transporte es convertirlos en transporte público.

Empresas del Automóvil y Startups Unidos por un Sueño

Empresas de automóviles y startups se han unido para ayudar a hacer viable un «autobús volador». Por ejemplo, la plataforma de compartir viajes Uber está desarrollando vehículos eVTOL con Joby Aviation. La visión es llevar su plataforma al aire a través de eVTOLs eléctricos. También están planeando construir una red de infraestructura de aterrizaje en áreas urbanas para apoyar los servicios de viajes compartidos aéreos. En 2020, el gigante de la fabricación de automóviles Toyota también invirtió cerca de $400 millones en Joby Aviation.

Al mismo tiempo, Toyota se asoció con una empresa llamada SkyDrive para desarrollar taxis aéreos y drones de carga. Colaboraron con la ciudad de Osaka para la aplicación práctica de sus transportes eVTOL. Planean tener el debut comercial del servicio para 2025.

El fabricante de aviones Airbus también está en el juego eVTOL con su prototipo, CityAirbus. El prototipo tiene un alcance operativo de 50 millas y una velocidad de crucero de 75 mph. Cuando se convierta en operacional, puede reducir el viaje al aeropuerto de horas a minutos. Aunque la tecnología es excelente, los eVTOL aún enfrentan el gran obstáculo de la seguridad y la regulación.

El Reto de la Seguridad en los Coches Voladores del Futuro

A todo el mundo le encanta la idea de los coches voladores, pero nadie quiere pensar en coches cayendo del cielo. La seguridad es el mayor desafío que enfrentan los coches voladores. Cuando un coche se avería, simplemente puedes estacionarte a un lado y esperar a los servicios de emergencia. Cuando el motor de un avión falla, puede ser catastrófico no solo para los pasajeros sino también para cualquier persona en el suelo. Mientras que la seguridad de los automóviles tiene una larga historia de innovación, la seguridad de los eVTOL aún está en pañales. Un pequeño accidente en un coche puede arruinar el día de alguien. Un pequeño accidente en un coche volador puede crear una reacción en cadena de colisiones que resultarán en una catástrofe.

Para los eVTOL volando sobre áreas urbanas, los riesgos son mucho mayores. No solo pone en peligro la vida de los pasajeros, sino también la de cualquier persona en el suelo. Los desarrolladores de eVTOL trabajan en estrecha colaboración con organismos reguladores como la FAA y la NHTSA para asegurar que estos servicios cumplan con los más altos estándares de seguridad una vez que estén abiertos para uso comercial.

El Futuro de las Carreras: Coches Eléctricos Voladores

Se agrava si los coches voladores se generalizan como vehículos privados. La educación y licencia de los conductores tendrán que ser más estrictas, más difíciles y eventualmente más costosas. Los aspirantes a conductores necesitarán aprender habilidades similares a las de los pilotos de helicópteros. Incluso los conductores experimentados tendrán que empezar desde cero porque volar un vehículo es totalmente diferente a conducir. Las escuelas de conducción tendrán que enseñar habilidades que solían enseñarse normalmente en una escuela de vuelo. También esperarán un mayor nivel de certificación de sus instructores, y por lo tanto, un salario más alto.

El Ruido y la Privacidad: Otros Desafíos de los Coches Voladores

También está el problema de la privacidad. Imagina tener un momento tranquilo con tu familia en tu patio trasero, y de repente un eVTOL pasa zumbando por encima de tu jardín. Las regulaciones no solo deberían cubrir la seguridad de los eVTOL. También deberían cubrir quién puede volarlos, y poner límites a dónde pueden ir. Y a pesar de toda la tecnología que se ha incorporado a estos vehículos, los eVTOL todavía hacen bastante ruido.

Incluso los drones más pequeños producen un zumbido muy notable. Si aumentamos el tamaño a eso de un pequeño autobús, creará un zumbido que te ensordecerá. Justo como Neil deGrasse Tyson dijo a Joe Rogan, «Todavía tenemos un problema de reducción de ruido que no se ha resuelto».

Innovación y Alternativas: ¿Serán los eVTOL la Solución?

Pero la tecnología avanza rápidamente. Las innovaciones tecnológicas de los coches eléctricos, como las baterías de estado sólido, ayudan a dibujar un futuro brillante para los eVTOL eléctricos. La electrificación ha ayudado a que los prototipos de eVTOL produzcan mucho menos ruido que los helicópteros. Aún pasarán algunos años más antes de que finalmente alcancen un nivel de ruido aceptable para los viajes urbanos.

Pero la electrificación trajo una gran desventaja. Al igual que los coches eléctricos, las baterías de los eVTOL tienen una mala relación potencia-peso. Si las baterías son más grandes y pesadas, los eVTOL necesitarán más energía para levantarse. Esto significa que los eVTOL no podrán llevar tantos pasajeros como los helicópteros de tamaño similar. La solución a este problema es tener baterías más densas en energía, o hacer que los motores eléctricos sean más eficientes.

En fin, los coches voladores como los eVTOL son una realidad emergente y un área activa de investigación y desarrollo. Sin embargo, existen desafíos significativos en términos de seguridad, ruido, privacidad y eficiencia energética que aún deben abordarse. Aunque parece que estamos un paso más cerca del sueño de coches voladores que se muestra en la ciencia ficción, la realidad puede ser diferente y no tan espectacular. Al igual que cualquier avance tecnológico, requerirá tiempo, innovación y una regulación cuidadosa antes de que podamos adoptarla de manera segura y efectiva.

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