Cuando gozamos de salud fácilmente damos buenos consejos a los enfermos, pero cuando gozamos de salud puede ser porque jamás nos hemos enfermado o porque superamos con éxito la enfermedad que nos agobiaba, por ello siempre debemos pensar con autonomía el consejo que nos den, mirar si quien nos lo dio tiene experiencia sobre ello y tomar la experiencia de este si nos es útil para resolver cualquier adversidad.
