Revista Historia
Don Sebastián de Colmenares y Vega recibió en 1716 el título de I Conde de Polentinos. Su padre, también llamado Sebastián, había nacido en Madrid el 5 de Enero de 1634. Fue Oficial 1º de la Secretaría del Despacho de Indias y viajó a Perú en 1667 como Secretario de Cámara del Virrey Conde de Lemos, grande de España, a propuesta del cual fue nombrado Secretario del Rey, después Veedor general y Pagador de la Plaza y Presidio del Callao durante 19 años con una renta de 3240 pesos. En 1668 contrajo matrimonio con la limeña Agustina de Vega que le dio una dote de 58.000 pesos. Su hijo, Sebastián de Colmenares y Vega nació en Lima el 19 de Noviembre de 1672 y el rey Felipe V le confirió el título de Conde de Polentinos, lugar de España donde vivieron sus ascendientes, el 20 de Julio de 1716. La historia es caprichosa y rebuscando documentos y artículos donde se haga referencia a este lugar, me encuentro con un reportaje firmado por Julio César Iglesias sobre la Casa de la Siete Chimeneas, un distinguido palacete madrileño que perteneció a los Condes de Mejorada, quienes se la alquilaban a los personajes más distinguidos de la Corte. Y es curioso porque ya en 1671 adquieren la propiedad los Condes de Polentinos que la mantienen hasta finales del siglo XVIII. Sebastián legó el título a su hijo Francisco José de Colmenares y Fernández de Córdoba, que fue II Conde, heredando el título su hijo Domingo María de Colmenares y Contreras (Valladolid, 1750-1811), siendo el III Conde. En Avila se encuentra el Palacio de Polentinos, que heredó Francisco de Colmenares en 1750, por lo que desde entonces esta casa se conoce con su nombre. Dos hijos de este recibieron sucesivamente el título: Don Felipe (1791-1869) y don Segundo de Colmenares y Caracciolo de Sole (fallecido en 1881) que fueron respectivamente IV y V condes de Polentinos. Quienes hacen el seguimiento de esta rama familiar, intuyen que uno de estos dos últimos vino a emparentar con una Casa-Xara, vinculando así los condados de Las Posadas y Polentinos. Un hijo de Don Segundo, don Aureliano de Colmenares y Taraba, al morir en 1890 mandó el Condado de Polentinos a su hijo don Aurelio de Colmenares y Orgaz, que fue el VII conde. Aureliano fue nombrado cronista oficial de la villa de Madrid (1943) y, de alguna manera, el ayuntamiento quiso hacerle un homenaje con la publicación de la obra “Investigaciones madrileñas”, que vio la luz en 1948, un año después de su muerte. A éste le sucedió en el título don Ricardo de Colmenares y Duque de Estrada, VIII Conde de Polentinos y X de Las Posadas. Se sabe que Ricardo fue dueño de 64 Hs entre Andoain y Vergara, en las que no hace constar su condición de Conde, si bien sus principales propiedades eran fincas urbanas en Valladolid y Madrid. Según Real Decreto de 27 de Mayo de 1912, y previo pago del impuesto correspondiente, se expide la Real Carta de Sucesión en el título de Conde de Polentinos, a favor de don Ignacio Colmenares y Gomez-Acebo, por cesión de su hermano. Documento firmado en Madrid el 30 de Noviembre de 2004 por la subsecretaria de Justicia López Aguilar. Pero tanto poderío y tantos olvidos bien merecen un comentario que les serviré en un próximo artículo.
Imagen: Palacio de los Condes de Polentinos en Avila, tomada de la Wikipedia
De la sección "La madeja"