Los cristales de agua son una formación natural qué se dan a consecuencia de la vibración qué se emana alrededor de esta misma según el doctor Masaru Emoto. Los cristales de agua forman diferentes figuras pero con el mismo patrón geométrico hexagonal. Según el científico anteriormente mencionado los cristales de agua se forman debido a las palabras negativas o positivas y estás pueden influir en este dicho líquido.
Al momento de expresar palabras negativas los cristales tienden a deformarse y hacer figuras amorfas que no tienen arte pero al momento de expresar palabras positivas el agua tiende a formar cristales hermosos con diferentes figuras y formas, dependiendo la palabra que sea expuesta por ejemplo: el amor forma un cristal, la armonía forma un cristal diferente y la palabra odio y las palabras repulsivas deforman los cristales.
La investigación del científico Masaru Emoto determinó que las palabras ya sea pronunciadas verbalmente o escritas afectaban de una u otra manera el comportamiento del agua y ese mismo científico concluyó que como el cuerpo humano tiene el 80% de agua las palabras o pensamientos negativos suelen influir en las personas ya que es bien sabido en la ciencia que todo vibran en el universo y aunque esto se declaró como una pseudociencia, en realidad están redescubriendo lo que los antiguos sabios ya habían dicho miles de años atrás.
El científico japonés ya mencionado se interesó mucho en el estudio de los cristales y dedicó muchos años de su vida a la investigación para comprobar y corroborar todas sus teorías. Experimento con agua de manantiales y también experimentó con el agua del grifo común tomando fotografías y viendo las diferencias que existían entre estas dos. Sus experimentos tomaron varios años y su conclusión fue contundente y es que la naturaleza es tan perfecta que hasta en los más simples detalles se ve la genialidad del universo.
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