De cien personas perseguidas en el mundo, 75 son cristianos perseguidos por su fe. El mundo no quiere "ver" la cristiano-fobia.
http://videos.lainformacion.com/mundo/una-camara-graba-el-momento-del-atentado-en-egipto-que-se-cobro-21-vidas-el-dia-de-nochevieja_lqV4jcjKZGotfvRnrmUBZ1/
---------------------------------------------------
Fuente: Infobae.com
Lo afirmó el experto Gilles Kepel, tras la reiteración de masacres en Egipto e Irak contra esa minoría religiosa, "chivo expiatorio" de grupos que en ella quieren golpear a Occidente
"Como ya sucedió en Irak, también en Egipto los cristianos se convierten en objetivo fácil. Signo, entre otros, de las dificultades internas de Al Qaeda y demás grupos extremistas similares: no logran golpear a los occidentales o al gobierno local, y entonces eligen víctimas más abordables, que de todos modos les aseguran una buena dosis de publicidad", explicó este estudioso del extremismo islámico al diario italiano Corriere Della Sera.
"Los grupos radicalizados que se inspiran en Al Qaeda en Medio Oriente han fracasado, no han logrado movilizar a las masas. Eligen por lo tanto a los cristianos como chivo expiatorio", agrega este académico del Instituto de Estudios Políticos de París.
Con excepción del Líbano, donde los cristianos constituyen el 30% de la población, en el resto de los países de la región esa fe tiene una representación muy minoritaria pero se trata de comunidades dos veces milenarias, con larga tradición e influencia y que, hasta ahora, gozaban de relativa tolerancia.
En Egipto, donde tuvo lugar la masacre de 21 personas en la Iglesia de los Santos de Alejandría, el atentado más cruento de la última década, los cristianos coptos representan el 10% del total de una población de más de 80 millones. Un porcentaje similar al de Siria, bajo en comparación con Occidente, pero muy superior al del resto de los países de Medio Oriente y Asia: 2% en Israel, 1% en Irak, 4% en Jordania, por citar algunos.
El atentado de Alejandría generó el repudio del mundo entero y un llamado del Papa Benedicto XVI a los líderes del mundo para que defiendan a los cristianos. Los coptos de Egipto salieron a la calle a protestar y se produjeron enfrentamientos con grupos musulmanes. Sin embargo muchos manifestantes declaraban que su enojo era en realidad con el gobierno que los discrimina en los empleos públicos.
Marco Tarquino, director del periódico católico italiano Avvenire, denunció que "Occidente y las grandes potencias no logran 'ver' la persecución de los cristianos en tantas partes del mundo; es un fenómeno para ellos inconcebible y sin embargo las agencias internacionales certifican que sobre cien personas perseguidas en el mundo, tres cuartas partes son cristianos por motivo de su fe". Según Tarquino, el mundo occidental está demasiado atento a la sensibilidad de los otros credos religiosos y no toma conciencia de la tragedia que representa la expansión de la cristiano-fobia.
Consultado acerca de si podría pasar con los coptos de Egipto lo mismo que con los cristianos de Irak, a los que la persecución prácticamente ha extinguido, Kepel aclara que "la iglesia copta es infinitamente más fuerte hoy que la iraquí, está más radicada en el país y con profundos lazos con la diáspora".
"Son entre 6 y 8 millones de personas, sigue diciendo el politólogo. En Detroit y muchas otras ciudades estadounidenses cuentan con comunidades cohesionadas y ligadas con el país natal, con posibilidades de condicionar la política de Washington".
Aunque los coptos de Egipto se encuentran discriminados en materia política, no sucede lo mismo en lo económico, según Kepel. "Es copto por ejemplo Naguib Sawiris, propietario de Mobinil, la mayor compañía de telefonía nacional. Nada que ver con los cristianos iraquíes que en pocos años desde 2003 se convirtieron en la sombra de sí mismos. En su mayoría emigraron, huyeron; una comunidad acosada".
En cuanto al margen de maniobra del presidente egipcio Hosni Mubarak para enfrentar ese problema, Kepel considera que debe optar "por un perfil bajo porque) de otro modo aprovecharían los salafistas [miembros de la rama más conservadora de la tradición musulmana] que son buenos para llenar las plazas acusando a los cristianos de ser agentes de Occidente y a Mubarak de estar a su servicio".