"Una tragicomedia que se mueve con sorprendente naturalidad entre el melodrama devastador y la comedia absurda"...
(La Vanguardia).
Esta película no ha dejado a nadie indiferente. Ha gustado y ha resultado floja a partes iguales. Yo me quedo dentro del primer grupo.
Los descendientes (Alexander Payne, 2011) cuenta la historia de Matt King (George Clooney), casado y padre de dos niñas, que se ve obligado a replantearse la vida cuando su mujer sufre un terrible accidente que la deja en coma.
Intenta entonces torpemente recomponer la relación con sus problemáticas hijas -la precoz Scottie, de 10 años (Amara Miller), y la rebelde Alexandra, de 17 (Shailene Woodley)- al tiempo que se enfrenta a la difícil decisión de vender las propiedades de la familia.
El argumento en sí no es nada del otro mundo: un padre que por sus ocupaciones ha delegado demasiado en su mujer la educación de sus hijas, hasta el punto de no saber casi nada de ellas...Al tener su mujer un accidente se da cuenta de todo lo perdido, del nuevo camino que debe emprender en una vida que cambia de la noche a la mañana.
Lo que me ha gustado es la forma de enfocar el tema, la habilidad del director para conjugar el drama con la comedia. Los personajes me han resultado muy creíbles, tanto el protagonista, como las niñas, pasando por el suegro (que refleja la postura de aquéllos que creen que sus hijos merecen más que lo que les dan sus parejas).
En la película se muestran perfectamente los problemas de incomunicación que pueden darse en una familia, las dificultades en la educación de menores y adolescentes que pasan por situaciones adversas.
Y en cuanto a las interpretaciones, pues ya os lo adelanté...The Artist merecía ser la mejor película, vale, pero el mejor actor, en mi humilde opinión, es George Clooney...Está soberbio, hace una de las mejores interpretaciones que le he visto desde que le sigo (desde antes de ser conocido en Urgencias). La película te mantiene un un baile constante entre el drama y la comedia, y Clooney en tan sólo unos minutos te hacer pasar de la risa a la emoción y las lágrimas, a veces en una misma secuencia.
Hay quien piensa que es un actor sobrevalorado, yo pienso justo lo contrario, su físico y su condición de galán juegan en contra de este Cary Grant del S. XXI (con la diferencia de que a Cary Grant esta condición le favorecía y nadie dudaba de sus cualidades como actor).
Creo que este actor tiene una trayectoria más que consolidada, ha logrado salir del leve encasillamiento que tuvo con algunos de sus trabajos. Tan sólo tiene un oscar como actor de reparto por Syriana, habiendo participado en proyectos como "Michael Clayton" o "Buenas noches y buena suerte", que también dirigía (porque eso es otra, dirige, y bastante bien). Lástima que todavía no tenga el reconocimiento que merece.