Allí se han encontrado con dos recibimientos: una cálida bienvenida oficial y otra más fría por parte de unos 200 manifestantes antimonárquicos que han hecho oír sus protestas.La llamada Red de Resistencia de Quebec (RRQ), el principal grupo opuesto a la presencia de los representantes de la monarquía británica en la provincia francófona, logró concentrar a unas 200 personas frente al ayuntamiento de la ciudad de Quebec para que Guillermo y Catalina sepan que 'no son bienvenidos'.
