Debemos mencionar en primer lugar, que la palabra emprendimiento no aparece en la RAE (Real Academia Española). Es una sustantivación del verbo emprender, el cual, significa comenzar a hacer un proyecto, una obra, un negocio… Pero cuando escuchamos o leemos la palabra emprendimiento, con sus sucesivas relaciones como emprendedor, nos encontramos, habitualmente, con un significado relacionado con el ámbito económico o de negocios. Un emprendedor es un individuo que se aventura a crear una empresa o un negocio, asumiendo, o enfrentándose a los riesgos o peligros del mercado, unos riesgos de carácter económico mayoritariamente.
¿Por qué está tan presente está palabra en nuestros días? ¿De qué hablan esos hombres con traje y corbata cuando mencionan el emprendimiento?
Esta palabra ha sustituido al anterior autónomo, ¿por qué? Es más llamativo utilizar palabras nuevas, la novedad incita a prestar más atención a los discursos, a pensar que se ha generado un cambio. La solución a la cuestión de porque escuchamos tanto esta palabra hoy en día y no anteriormente, es por la grandísima cantidad de paro que existe en nuestro país.
El actual emprendedor ha sustituido al anterior autónomo
subvenciones y ayudas a las personas que deciden emprender y crear nuevas empresas
Potenciando la creación de pequeñas empresas el estado elimina su obligación de crear puestos de trabajo públicos y ahorran dinero en algo tan importante y con tanta trascendencia como los salarios de los trabajadores.
El estado ofrece subvenciones y ayudas a las personas que deciden emprender