“Visita guiada a la parte oculta del museo del traje”
Los museos son como un desfile de moda. Nosotros solamente podemos apreciar el trabajo final, en el desfile vemos cada uno de esos vestidos puestos en cuerpos idénticos acompañados de rostros de maniquís andantes. En el caso de los museos, nos paramos a observar los cuadros, los objetos, las telas… Con cierta minuciosidad, apreciando cada uno de los detalles como en el caso anterior, pero nunca valoramos realmente el verdadero trabajo que esconden tras ello.
Esta mañana he tenido la oportunidad de poder ir a visitar la parte oculta del “museo del traje”, los que me seguís desde hace tiempo sabéis que tengo cierta debilidad por la moda y sobre todo por este museo en concreto. Lo mas curioso de todo es que se creó con la finalidad de exponer arte contemporáneo en 1925, pero no es hasta años mas tarde cuando deciden mostrar parte de la ropa contemporánea que se llevaba en ese momento. Es ahí cuando aparece la idea de realizar aquello que conocemos hoy en día, aunque todo se queda en el aire hasta el año 2008, cuando el proyecto coge forma y por fin la ciudad acoge un museo totalmente distinto y necesario en Madrid. Sobre todo, porque el estilo y la moda en si supone siempre un reflejo de la sociedad del momento.
Durante la visita nos han explicado que todos los trajes que llegan al centro son registrados desde el primer momento, lo que ello implica realizar una fotografía y después mantenerlo aproximadamente unos 15 días en una especie de tanque que nos han mostrado, donde aíslan el oxígeno para evitar que las partículas dañinas estropeen los tejidos. Después nos han mostrado los maniquís donde irán cada uno de ellos, en un principio las medidas eran muy estándar, luego se realizaban a medida por lo que los bustos tienen que ir cambiando. También hemos podido ver la forma de guardar cada uno de ellos, con una funda de tela sin cremallera, simplemente atadas para evitar que se rocen. El proceso de restauración es lo mas curioso, ya lo conocía en la carrera, pero cuando lo ves en un entorno de trabajo, es cuando le das mucha mas importancia.
Finalmente hemos podido ver los almacenes, donde cada una de las telas, prendas, accesorios e incluso objetos cotidianos, muebles, electrodomésticos, juguetes, muñecos… Se encuentran guardados con sumo cuidado, acompañados cada uno de su ficha tanto por ordenador como a mano en el caso de que se utilicen algunos de ellos. En ese sentido está bastante cuidado, para evitar que no se pierda nada. Para aquellos que piensen que están bastante desordenados y descuidados esa otra parte de los museos, debo deciros que lo he visto muy colocado, ordenado y limpio. Aunque pienso que para llevar lugares como este, lo mínimo es tener cierto orden porque sino al final nada sale como se esperaba.
Nos han comentado que a lo mejor se vuelven a repetir la jornada de puertas abiertas a la parte oculta. Como he ido poniendo en el Twitter… Os recomiendo ir, no solamente por la parte que implica a la moda, sino porque te hace valorar aún más todo el trabajo que lleva adentro. Muchas veces no apreciamos detalles tan importantes como ese. A ver si con un poco de suerte mas museos se animan a seguir esta iniciativa