Los Extraños: Cacería nocturna, Película de género sin sorpresas

Llega a nuestras pantallas "Los Extraños: cacería nocturna" cinta de género, un slasher en toda regla que intenta continuar el éxito de la primera entrega "Los extraños" que fue una sorpresa en taquilla, una película de terror, una historia de asesinatos de libro pero con un toque especial. Su arbitrariedad y el sin sentido de la historia original cautivó a muchos aficionados al género y atrajo a otros muchos. Por aquel entonces (2008) Liv Tyler era un gran reclamo y la persecución inmisericorde al que se vio sometida junto a su pareja en esta cinta de terror tuvo muchos adeptos.
Los Extraños: Cacería nocturna, Película de género sin sorpresas

En esta casa será una familia la acosada por una serie de asesinos enmascarados. En ese aspecto poco cambia, las motivaciones son aleatorias y los asesinos son tan despiadados como faltos de emoción. Sin embargo nos encontramos ante una película que pierde mucho de la esencia y motivaciones que convirtieron la primera entrega en un éxito. Para empezar la sucesión de asesinatos recuerda mucho a cualquier película de Serie B donde van cayendo los protagonistas de manera irremediable como fichas de dominó.

Protagonizada por Christina Hendricks (Drive, Mad men), Martin Henderson (Everest), Bailee Madison (No tengas miedo a la oscuridad) y Lewis Pullman (Lean on Pete), nos cuenta la historia de esta familia, cuando Cindy y su marido Mike deciden cambiar de vida y emprender un viaje con su rebelde hija adolescente Kinsey y su hijo Luke llegando a un alejado campamento, unos golpes en la puerta de su caravana serán el inicio de una terrorífica noche. Tres enmascarados les obligarán a unirse para luchar por sus vidas.

La realización es típica, no nos llama la atención nada en particular, si acaso la falta de empatía de los asesinos, pero sin embargo este enfoque no es nuevo, desde su éxito en 2008 ya se ha usado en otras muchas cintas de terror. Los asesinos sin motivaciones claras, con arbitrariedad desde luego que transmiten cierta desazón a los espectadores y en este caso una vez superado ese periodo la película se hace larga (y eso que dura 85 minutos), por ejemplo hay películas mucho menos ambiciosas y más entretenidas como la infravalorada "Hush".

Los actores no ayudan demasiado, Bailee Madison vuelve a demostrar que no es capaz de desatar demasiada empatía en el espectador y no se acaban de entender muchas cosas de las que pasan, el guión es sencillamente caótico. A pesar de ello la película puede ser disfrutable para los más fans del género. Una película prescindible.