Crítica: 4,485 Público: 4,789 España: S/C Rugoleor: S/C
Ficha:
Título Original: The Ghosts of Girlfriends Past
Director: Mark S. Waters
Guionistas: Jon Lucas, Scott Moore
Intérpretes:
Matthew McConaughey, Jennifer Garner, Breckin Meyer, Michael Douglas, Emma Stone, Robert Forster, Anne Archer, Christina Milian
Productores: Brad Epstein, Jonathan Shestack
Fotografía: Daryn Okada
Música: Rolfe Kent
Montaje: Bruce Green
Nacionalidad: Estados Unidos
Año: 2.009
Duración: 100 minutos
Edad: 7 años
Género: Comedia, Fantástica, Romántica
Distribuidora: TriPictures, S. A.
Estreno: 01-01-2.010
WEB Oficial: Web Oficial de la película en Estados Unidos
Espectadores: 304.465
Recaudación: 1.893.372,01 €
Visitas: 0
Popularidad: 0,00%
Puesto:
Sinopsis:
Connor Mead es un soltero empedernido. Cuando todo parece indicar que Connor va a arruinar la boda de su hermano, recibe una visita del fantasma de su tío Wayne, legendario playboy y amante de las fiestas. Juntos descubrirán lo que hizo que Connor se convirtiera en mujeriego.
Comentario:
Connor es un fotógrafo de éxito y también un mujeriego que se niega a aceptar el compromiso hasta que acude a la boda de su hermano pequeño. En plena celebración, se le aparece el fantasma de su tío Wayne y más adelante todas las novias del pasado y del futuro. Protagonizada por Matthew McConaughey y Jennifer Garner, y con Michael Douglas como el irreverente tío que ejerce de maestro de ceremonias, “Los fantasmas de mis ex novias” reaviva el clásico cuento de navidad de Dickens y lo traslada al contexto matrimonial.
Crítica:
04-01-2.010 – JOSU EGUREN
Vivir del cuento
Es urgente que alguien escriba un nuevo cuento de Navidad que desplace al del vapuleado Charles Dickens en los afectos de los guionistas americanos, eso o que dejen en barbecho el clásico durante un par de décadas. Son tantas las adaptaciones que se han hecho de Mister Scrooge que resulta imposible no recitar el planteamiento de “Los fantasmas de mis ex novias” de memoria, aunque Mark S. Waters haya querido rizar el rizo transformando al gruñón avaro inglés en un fotógrafo de moda de bragueta fácil. Como viene siendo habitual en la filmografía reciente de Matthew McConaughey, las mujeres que van pasando por turnos por el tálamo del actor gastan un físico espectacular, son extremadamente superficiales e indubitablemente idiotas, y a pesar de todo existe un sector del público femenino que disfruta proyectando su imagen en este tipo de avatares sin cerebro. Simone de Beauvoir estaría orgullosa de vosotras. Pero... que no llegue la sangre al río, porque Jennifer Garner se arroga el papel de representante intelectual de la especie, a priori, con la intención de desmontar algunos tópicos, aunque finalmente lo único que haga es reforzarlos. Para equilibrar la balanza, los hombres tampoco salimos bien parados; ahí queda la primitiva división entre 'nerds', hombres sensibles y comprometidos, fóbicos al compromiso y machos alfa perfectos. No imagino qué opinaría Sartre.
A todo esto, no sé si a alguien le importa que ésta sea una nueva reedición de la lista de clichés puestos en liza en millones de comedias románticas, ahora sin gracia, o que la moralina final llegue precedida de una acumulación de gags de encefalograma plano, porque siempre habrá quien se deje seducir por su estética ramplona, la química que existe entre McConaughey y Garner, o sus infantiles juegos de palabras. Lo mejor para el final: Michael Douglas interpretando una versión menor de sí mismo y confesando que sigue obsesionado con tirarse a todo lo que se mueve. Hay cosas que nunca cambian. Feliz año.