No suelo escribir de temas explícitamente políticos en este blog, pero, por lo que voy viendo, tengo la impresión de que la llegada de los fondos europeos destinados a la recuperación postcovid pueden ser una merienda de negros, si se me permite el término ahora políticamente incorrecto. Es una gran oportunidad de dar un impulso a la modernización y a la creación de riqueza para todos, pero existe el riesgo de que una maraña burocrática, aderezada con la pillería (léase avaricia y corrupción) propia de este país, sea una esperanza perdida más que solo consiga engrosar los bolsillos de los sinvergüenzas de siempre.
Nos jugamos también el prestigio que nos queda como país.
Es algo en lo que todos supongo que estamos de acuerdo, excepto los pillos. ¿Ganarán ellos o ganaremos todos los ciudadanos? La responsabilidad es de los cuatro poderes de nuestra democracia: ejecutivo, legislativo, judicial y medios de comunicación. Al menos en esto les hemos de exigir consensos y eficacia.