Investigadores de la Facultad de
Medicina de la Universidad de Boston encontraron evidencia de una enfermedad
cerebral temprana por encefalopatía traumática crónica (CTE) después de impactos
en la cabeza, incluso en ausencia de signos de conmoción cerebral. Los primeros
indicadores de patología CTE no solo persistieron mucho después de la lesión
sino que también se diseminaron a través del cerebro, proporcionando la mejor
evidencia hasta la fecha de que el impacto de la cabeza, no la conmoción
cerebral, causa CTE. Los hallazgos, publicados en línea en la revista Brain ,se
basan en el análisis de cerebros humanos de adolescentes con lesiones recientes
en la cabeza y modelos de ratones que recrean el impacto de la cabeza
relacionado con el deporte y la exposición al estallido relacionada con el
ejército. Los investigadores también realizaron experimentos de laboratorio y
modelos informáticos. Los resultados del estudio arrojan luz sobre los orígenes
del CTE y la relación con la lesión cerebral traumática (TBI), la conmoción
cerebral y la lesión cerebral subconcusiva. La CTE es una enfermedad
neurodegenerativa caracterizada por una acumulación anormal de proteína alrededor de pequeños vasos sanguíneos en el
cerebro. El CTE causa muerte de las células cerebrales, déficits cognitivos y
demencia. La patología cerebral de CTE se ha observado en cerebros de
adolescentes y adultos con exposición a lesiones repetidas en la cabeza,
episodios de conmoción cerebral y subconjuntiva. Sin embargo, los mecanismos
que causan CTE y la relación con la conmoción cerebral, la lesión subconcusiva
y TBI siguen siendo poco conocidos.