Los hombres mojados no temen la lluvia

Los hombres mojados no temen la lluviade Juan Madrid.Alianza Editorial, colección Alianza Literaria, 2012. XIV Premio Quiñones. Rústica, 344 pp., 18,00 eurosPor José R. Cortés Criado.El malagueño Juan Madrid vuelve a sorprendernos con otra magnífica novela negra. Y es que como decía Manuel Vázquez Montalbán, “los escritores de novela negra en España somos tan pocos, que Juan Madrid es uno de los dos”.

En esta ocasión el escritor nos sumergirá en la mafia italiana, los graves casos de corrupción que hoy se dan en nuestro país, en la sociedad occidental, y nos mostrará el engaño que ocultan las grandes fortunas,  la forma de enriquecerse de más de uno ocultando la verdad o haciendo uso de una doble moral que, por desgracia, conocemos muy bien en nuestro país.El protagonista es un abogado romántico, al que le chiflan las mujeres y que sabe sobrevivir entre sus colegas y los juzgados de igual manera que lo hace moviéndose en los bajos fondos, y que comienza convirtiéndose en el sospechoso del crimen que investiga.Tiene un socio de origen argentino con un pasado oculto en el que el protagonista no quiere indagar hasta que uniendo las piezas llega a una conclusión sobre su profesionalidad.Además cuenta con la ayuda, muy importante, de Aurelio Pescador, un hombre extraño, que suele aparecer cuando hace falta y que hasta el final no llegamos a saber algo más de él. Con estos mimbres y el caso de una prostituta que es asesinada por haberse apropiado de un DVD comprometido para un importante señor  del mundo empresarial, Madrid elabora una novela muy acertada, sobre todo en los diálogos, que son la base de la trama donde las palabras justas y los silencios precisos conforman una línea argumental muy importante.La vida de los protagonistas, los claroscuros de sus vidas, los giros en el desarrollo de la historia, la enrevesada vida que hay tras las altas finanzas, y las ramificaciones mafiosas hacen que esta novela sea buena de verdad.La novela está escrita con buen ritmo narrativo, con la habilidad propia del autor para las escasas descripciones de los personajes, y a la manera cinematográfica de Juan Madrid para presentar al lector los escenarios y el desarrollo de la trama; con todo esto ha sabido, una vez más, engancharme y hacerme disfrutar sin descanso hasta el final del libro, es una narración que atrapa.

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