Los inventos que toda mamá necesita y todavía no existen

La vida en un hogar con muchos chicos por momentos se torna caótica. Intento mantener el orden y en forma reiterada les digo a mis hijos cuáles son sus tareas y responsabilidades. Lo repito con bastante frecuencia porque esa información puntual se la olvidan, no como los apellidos de los jugadores de todas las selecciones de fútbol (ahí la memoria es increíble).

Hace años que estoy esperando algunos inventos que hagan que mi día sea más simple. Los ordené en esta lista que no es excluyente de otros tantos objetos que desearía tener.

Los quiero para el día de las tareas hogareñas, porque para el de la madre, el de la mujer o el de ingeniera prefiero cosas para mí y no para la casa.

Un guarda juguetes automático: me imagino que los juguetes tengan un chip y que al momento de apretar un botón vaya cada uno a su cajón. Al cabo de unos minutos, una vuelve con las uñas recién pintadas y está cada cosa en su lugar.
Un objeto que guarde la ropa en los placares: ya sea porque quedó tirada o porque está lista para volver a su lugar, poner las medias en su cajón, colgar las camisas y apilar las remeras puede sacar bastante tiempo y paciencia.
Una alarma para cuando falten las cosas básicas de la cocina: quizás lo escuché por algún lado, pero no lo vi implementado. La alarma avisa cuando se está por terminar la leche, por ejemplo, o si ya no quedan los ingredientes para el desayuno de los chicos. Además de informar, hace el pedido en el supermercado, coordina la entrega y el pago.
Un artefacto para ponerle manteca y dulce a las tostadas. En las familias numerosas, una tarea sencilla puede transformarse en algo bastante complicado. Hacer tostadas con manteca y dulce puede demandar minutos preciosos en una mañana escolar.

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