Por todo lo anterior, por el aprecio que le tenemos a lo que el Instituto Columela ha sido y ha significado históricamente para la ciudad de Cádiz y en reconocimiento y apoyo a los columelios que en él hoy desarrollan su actividad docente, manifestamos, en primer lugar, nuestro público rechazo al procedimiento de elaboración y a los contenidos de la LOMCE
Dos maestros del Columela, Juan Pablo Wert y Pepe Pettengui
En la tarde de ayer viernes, maestros del Instituto Columela de Cádiz se reunieron a modo de homenaje al instituto en su 150 aniversario. Allí estaban ex directores, ex profesores y profesores, maestros que han dejado y dejan su bien hacer en las generaciones de jóvenes de Cádiz. Siempre al día en conocimientos, siempre al día en valores, siempre en el marco de una enseñanza pública.
En esta entrada, Mi Mentidero quiere rendir un homenaje a todos y todas que hacen del magisterio una de las profesiones más queridas entre la ciudadanía. Y que mejor que reproducir su manifiesto, y un ¡gracias maestros!
Un grupo de antiguos profesores y profesoras del Instituto Columela de Cádiz, con ocasión de los actos de celebración del 150 aniversario de su fundación, queremos manifestar públicamente nuestro agradecimiento y satisfacción por haber formado parte de ese numerosísimo colectivo que, generación tras generación, ha trabajado con empeño y profesionalidad a favor de los jóvenes de esta ciudad, inculcándoles valores cívicos y conocimientos académicos con los que poder, de la mejor manera posible, afrontar su inserción social, su futuro laboral y su felicidad personal.
Desde aquellos lejanos tiempos fundacionales, en que el Instituto Columela formaba a los jóvenes de las clases burguesas de la ciudad, hasta nuestros días en una sociedad democrática, con un alumnado de variada extracción social, el profesorado del Columela ha tenido que desarrollar su labor docente en muy diferentes circunstancias (condiciones materiales, contextos ideológicos, reconocimientos sociales, leyes de educación, planes de estudio, etc.), que unas veces facilitaron sus tareas y otras las entorpecieron y dificultaron.
Hoy, como ayer, al cumplirse el 150 aniversario de su fundación, nuestro Instituto se verá ante una nueva circunstancia: la recientemente aprobada Ley Orgánica para la mejora de la calidad educativa (LOMCE). Una ley, aprobada por la mayoría parlamentaria del Partido Popular, sin consenso político, sin acuerdo con los sindicatos y sin atender a los criterios de las organizaciones educativas. Una ley contestada en los centros educativos, en las redes sociales y en la calle, por considerar que introduce elementos ideológicos, confesionales y de segregación. Una ley que, con supuestas medidas para mejorar la calidad de la enseñanza, como la "elección de centro" o "los centros de excelencia", encubre importantes recortes presupuestarios y la consiguiente degradación de las enseñanzas públicas frente a las privadas y concertadas. Una ley que acaba con la necesaria asignatura de Educación para la Ciudadanía (después de haberla demonizado con acusaciones a supuestos contenidos que realmente no tenía) y refuerza la religión como asignatura dentro de los centros escolares, dificultando la convivencia y la integración igualitaria que el laicismo y la aconfesionalidad siempre aportan a las comunidades educativas.
Por todo lo anterior, por el aprecio que le tenemos a lo que el Instituto Columela ha sido y ha significado históricamente para la ciudad de Cádiz y en reconocimiento y apoyo a los columelios que en él hoy desarrollan su actividad docente, manifestamos, en primer lugar, nuestro público rechazo al procedimiento de elaboración y a los contenidos de la LOMCE, y, en segundo lugar, nuestro deseo de que se elaboren y aprueben leyes educativas consensuadas, que refuercen el papel social de la enseñanza pública y faciliten en los centros la integración, las tareas docentes y la labor educativa.