Revista Cultura y Ocio

Los mejores bailes para quemar calorías

Por Asb Centre Pedro Gea @ASBCentre

Aunque el invierno nos parezca largo y frío, la verdad es que no nos daremos cuenta y de pronto estaremos ya en verano. Tanto si nuestra intención es prepararnos ya para la operación biquini como si queremos manteneros en forma todo el año, hoy repasaremos algunos bailes que son ideales para quemar calorías y así podernos deshacer de esos quilos de más.

 Los 7 mejores bailes para quemar calorías

En el portal web about nos presentan un listado de siete bailes. ¿Quieres conocer cuáles son? Pues sigue leyendo:

El ballet: Parece mentira, pero el ballet es uno de los bailes que más ayudan a quemar calorías. Aunque a primera vista pueda parecer un baile lento y de poca actividad, la verdad es que esto está muy lejos de lo que es realmente: el ballet no solo ayuda a quemar sino que cumple otra excelente función: la de mantenernos en forma y hacernos aumentar nuestra resistencia física. Sólo con practicarlo una hora se pueden llegar a quemar unas 450 calorías, que además seguramente sean más porque durante los ejercicios de calentamiento también se quema un poco.Si además tenéis algún problema de dolor de espalda o mala postura, no dudéis en que este es uno de vuestros bailes.

Danzas africanas: ¿habéis visto alguna vez a personas bailar danzas de origen africano? ¡esto sí que es movimiento! Aquí no hay excusa: sus movimientos rápidos y constantes nos ayudarán a mover el esqueleto y a quemar varias calorías en un breve período de tiempo.

El Flamenco: decíamos de los bailes africanos, pero el flamenco no se queda corto: movimiento y nervio puro para un tipo de baile pasional que puede llegar a hacernos perder entre 300 y 400 calorías en una hora (de hecho, todos los bailes citados en este artículo queman más o menos la misma cantidad de calorías: una mediana de 400 en una hora). Si practicamos flamenco lo notaremos también en brazos y piernas, que se irán fortaleciendo. También va bien para problemas de espalda y postura.

Hip Hop: bailar hip hop no es una cosa que pueda hacerse de un solo modo. Existen tantas variedades como personas, pero lo que sí que es seguro es que su práctica nos ayudará a quemar, incluso si lo hacemos con esmero podemos llegar a quemar unas 600 calorías por hora, algo un poco superior a la media de los otros ejemplos. Su principal característica es la técnica, ya que es básicamente libre (freestyling).

Bailar merengue: un poco de música merengue y sus movimientos correspondientes también nos ayudarán en la tarea de la quema de calorías. En este caso, su principal característica comparada con las demás es el continuo movimiento de caderas. Quien baila merengue sabe que no se para ni un momento.

Salsa: la salsa es conocida alrededor del mundo. Sus practicantes, su música, sus festivales y sus características hacen que cada vez haya más personas en el mundo que la practiquen de forma continuada. Bailar salsa es también, como en el caso del merengue, un vaivén de movimientos, tanto de cadera como de cuerpo entero. Es quizá la forma más divertida de perder peso, que además se puede hacer en pareja y en cualquier parte.

Tango argentino: por último y cerrando esta lista bailonga tenemos el tango argentino. Aquí pasa un poco como el primer ejemplo que hemos puesto, el ballet: el tango argentino es un baile que es más lento si lo comparamos con la salsa o el hip-hop, pero no por eso deja de hacernos quemar calorías. Sus movimientos ayudan a fortalecer el cuerpo y a quitarnos esos pequeños quilos de más.

Estos siete bailes citados son solamente meros ejemplos de lo que hay y de lo que podemos hacer para quemar algunas calorías. Si nuestro baile preferido no está en la lista no pasa nada, ya que no por eso significará que no podáis quemar calorías: todos los bailes que implican movimientos sirven para quemar. Quizá es verdad que algunos requerirán más tiempo, pero lo básico es que si practicamos de forma periódica y continuada tarde o temprano iremos consiguiendo nuestro objetivo y veremos que nuestro cuerpo lo va notando. ¡Es cuestión de tener paciencia y muchas ganas de bailar!


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