La artrosis es una dolencia que viene producida por el desgaste que sufren las articulaciones del cuerpo humano (cadera, columna, rodillas y manos). Un dolor intenso ante movimientos de las extremidades o falta de movilidad en ellas son síntomas claros de sufrir una artrosis.
No obstante, con unos sencillos cambios en tu vida cotidiana puedes mejorar tu situación.
·1· Más setas.
Sabemos que no gustan a todo el mundo, pero son muy necesarias para tratar la artrosis: servidas con aceite de oliva, suponen un gran remedio para evitar los huesos oxidados. Esto es posible por su contenido en selenio.
·2· Practica deporte.
No se trata de practicar ejercicios físicos muy bruscos, pero sí que deberíamos optar por aquellos que mejoren la movilidad y flexibilidad de las articulaciones. Clases de yoga o natación son dos opciones muy recomendables.
·3· Agua de mar.
Si vives cerca del mar, en verano lo tienes perfecto para ir a refrescarte a la playa. De lo contrario, prepara un baño caliente con abundante sal marina y sumérgete para relajar tus articulaciones y menguar el dolor.
·4· Pescado azul en la mesa.
Pescados como el arenque, la sardina o el atún están muy indicados por su aportación en ácidos grasos omega-3, uno de los principales responsables en el fortalecimiento de tus articulaciones.
·5· Ojo con algunas bebidas.
El café, el alcohol o el té son tres tipos de bebidas estimulantes que únicamente empeorarán tu artrosis.
·6· Evitar un consumo excesivo de proteínas.
Tomar proteínas en exceso ayuda a que se forme ácido úrico en tu organismo. Ten en cuenta que alimentos como la carne, los lácteos, los huevos o el pescado se deben ingerir, pero no más de una vez al día.
·7· Regálate un masaje.
Y mejor si es con una loción natural. Te los puedes hacer tú mismo, pero también puedes acudir a un especialista. En el primer caso, opta por aceites de árnica o áloe vera en gel, que bajan la inflamación de la artrosis.