Me encanta la comida japonesa. Me chifla. Pese a que mi primer contacto con el pescado crudo no fue del todo satisfactorio, los años han educado el paladar correctamente. Pero no sólo me gusta el sushi. Me gusta el ramen y el udon, me gusta el okonomiyaki y todo lo que esta parte de la gastronomía asiática nos ofrece. Pero los restaurantes japoneses en Madrid se han enmarcado en una dualidad complicada en los últimos años: o son carísimos o están sumergidos en un asiático fusión de malísima calidad en el que te ofrecen un atún con sabor a corcho.
Por eso, tratando de evitar esta dualidad y no recomendaros un japo de 100 euros el cubierto ni uno tras cuya experiencia me insultaréis, he pasado meses elaborando esta lista para la que he contado, además de con mis propios gustos, con los de amigos muy relacionados con Japón y su gastronomía, bien porque han vivido allí tiempo o porque trabajan en empresas japonesas. Y ésta es la lista que hemos hecho. No será la última, aviso.
*Tradicionales:
1.- Miyama: preguntes a quien preguntes, saldrá este nombre. Es por ello que me inclino a ponerlo aunque el precio medio es más alto que los seleccionados en el resto de la lista. Cocina clásica japonesa, con materia prima de altísima calidad y amplia variedad de guisos tradicionales nipones. Destacan el maki especial de atún picante y los niguiri de toro, chicharro o gamba roja, aunque siempre depende de la temporada.
El de Castellana está decorado con aire minimalista, con madera de castaño. En el de Flor Baja, la madera es más oscura. En ambos, se puede disfrutar del arte de los cocineros, cómo preparan y presentan ciertas recetas a la vista de todos. Miyama. Calle de la Flor Baja, 5 o Paseo de la Castellana, 45. Precio medio: 50-60€. En la web del grupo Miyama, tienes los datos y el contacto para reserva.
2.- Miki: Miyama Flor Baja tenía un chef reconocidísimo llamado Hiroo Miki, que dejó este restaurante y decidió montarse la vida por su cuenta. No es el restaurante más bonito del mundo, es pequeño y sencillo, situado en una calle trasera del barrio de Prosperidad pero el corte del sushi es perfecto, la materia prima es excelente así que sólo queda apreciar la pureza de la técnica y relamerse de lo bueno que está todo. Erizo, toro, salmón… Tempuras originales, buenísimas las vieiras salteadas de entrantes, cantidades adecuadas y muy buen trato. Sale a una excelente relación calidad y precio. Miki. Calle Duque de Sevilla, 4. 910 83 69 63. Precio medio: 35-40€. No tienen web así que tendremos que conformarnos con su Facebook.
3.- Kimura: la puerta del restaurante japonés Aki, en la calle Echegaray, estuvo meses plagada de mensajes de despedida del que fue uno de las tabernas niponas con mejor pescado de Madrid. Por fin, el itamae (cocinero jefe) de Aki decidió abrir su propio comedor, con su nombre y su buen hacer en el sushi clásico. Está al lado del Retiro pero en una trasera que es difícil de encontrar. La decoración es más occidental, menos auténtica, no tiene pinta de bareto japo, pero aun así, tiene fieles seguidores. Grandes niguiris, buen sushi, alguna elaboración un poco más original, presentaciones sencillas y sobrias, sake, te verde y la sensación de que hay cosas buenas que se mantienen. Indispensable. Kimura. Alberto Bosch, 14. 918058021. Precio: 35€. Los datos de carta y reservas lo tenéis en la web de Kimura y en el Facebook.
4.- Donzoko: en la misma calle que el extinto japonés Aki, está este restaurante decorado al estilo nipón con una carta clásica, con buenos cortes de pescado y materia prima de calidad. De los primeros restaurantes japoneses abiertos en Madrid, su estilo o decoración puede haber quedado algo trasnochado pero desde luego, la cantidad de ciudadanos japoneses que se ven en sus mesas (o los turistas que entran) al menos dan fe de que se come buen sushi. Muy interesante su menú bento y sus platos tradicionales. Los camareros son muy majos y aquí, me pegué un atracón de pescado crudo en pleno embarazo. Cosas que no debería confesar. Donzoko. Calle Echegaray, 3. 91 429 57 20. Precio medio: 35€.
5.- Naomi: si este no es el primer japonés de Madrid, poco le falta. Un cartel a la entrada atestigua que se abrió en septiembre de 1974 y yo no puedo evitar imaginarme qué sería de esta familia japonesa, Katsuo y Hojo, abriendo este sitio en la dictadura, por más que estuviera ya dando sus últimos estertores. Y el sitio en sí mismo ya es una experiencia. Primero porque cuesta varios intentos reservar mesa y segundo, porque es como una casa de comidas de Cuéntame en versión japonesa. Tatamis, barra de sushis, puertas correderas de madera… Me gustan los guisos como el obakarei, el nasudengaku o el delicioso hamachidon, me gustan los cortes de pescado y me gusta la matrona, que censura o aprueba las comandas y te avisa de qué cosas te pueden gustar o no. A mi me resultó un sitio inolvidable. Impagable pero para todo hay gustos y si no te va sentarte en sillas de sky, no es tu sitio. Naomi. Calle Ávila, 14. 915 72 23 04. Precio: 25€-35€. No es que haya mucha información en su Facebook pero algo es algo.
6.- Mushashi: el japotalego, el japo de Callao del menú del día a 1.000 pelas ya no es tan barato pero sigue siendo una opción para comer menús tradicionales japoneses por poco dinero. Sushi y sashimi variado y abundante, ricos platos de arroz, gyozas, pollo, tallarines, teriyaki y muchos más guisos típicos. No es nada bonito, los adornos parecen de chino, pero el servicio es eficaz y el menú está realmente rico. La sopa de miso, de las mejores de Madrid. Mushashi. Calle de las Conchas, 4. 91 559 29 39. Más información en su web y en Facebook.
7.- Y me gustaría añadir tres más a esta lista: Nagoya (Calle Trafalgar, 7. 914 486 907. Precio medio: 20-30€. Esta es su web) Kokoro (Calle Don Ramón de la Cruz, 72. 912 811 588. Precio medio: 25-30€. Esta es su web) y Ginza (Plaza de las Cortes, 3. 914 297 619. Precio medio: 35-40€, el japo del Congreso, uno de los primeros de Madrid en tener kaiten, la cinta transportadora que desplaza los platillos como si fueran maletas bajando de un avión), pero os estaría hablando sólo por referencias y he visto críticas dispares en las webs. Os los dejo apuntados y si vais, me contáis y vamos completando.
Hasta aquí llega la lista de mis restaurantes japoneses clásicos favoritos. En la próxima lista, hablamos de sitios más informales pero muy sabrosos como las izakayas Hattori Hanzo o Hanakura, de especializados como Ramen Kagura o Chuka Ramen Bar o de formatos deliciosos que se esconden en mercados como YokaLoka o Yankenpon Washoku. Espero vuestros comentarios para seguir enriqueciendo la lista.