Este libro era uno de mis eternos pendientes: ese grupo de libros, generalmente clásicos que, aunque no los tenga en posesión, pienso leerlos antes o después. Un año he tardado desde que me compré esta edición hasta que finalmente lo he leído. La verdad es que es un novelón (tanto por la historia como por el tamaño, jeje), pero no solo es la historia, puesto que el autor habla sobre muuuchas otras cosas. Pienso que es medio ensayo medio novela.
El hilo conductor de la historia es un expresidiario llamado Juan Valjean. Estamos a principios del siglo XIX. Es de suponer que una persona como él, pobre, sucio y despreciado por todos, no aspire a una vida mejor que la que había tenido antes de ser encarcelado, cuando estaba en la más profunda miseria y tuvo que robar una barra de pan para alimentar a sus sobrinos… Pero la providencia quiso que se cruzara en su camino con un obispo más que bondadoso, que le enseñó que todavía hay gente que cree en los demás. Juan Valjean se convertirá en el señor Magdalena, un empresario muy rico, pero también honrado y generoso con los demás.
En la misma época pero en diferente lugar nos encontramos a Fantina, una pobre chica que se queda embarazada pero es abandonada por su pareja, así que no tiene cómo mantener a su hija. Decide viajar hacia donde hay trabajo, pero deja a su niña al cuidado de unos posaderos, los Thénardier, a cambio de una renta que Fantina paga religiosamente mes a mes. Su objetivo es ahorrar para poder ofrecer un buen hogar a su hija, que se llama Cosette. Pero, deebido a las habladurías de la gente, Fantina pierde su trabajo y se ve relegada a vivir en las capas más bajas de la sociedad, con serios problemas para enviar dinero a los Thénardier. Cosette será maltratada por esta pareja de posaderos, que además engañan sin ningún pudor a Fantina.
Y por último está Mario, un chico que siempre ha vivido bajo la tutela de su abuelo sin saber quién era su padre y, cuando lo descubre, su punto de vista cambia y, con él, toda su vida.
Un pasaje del libro me hizo recordar el Convento de la Concepción
Es evidente que lo que he contado es una visión muy, pero que muy general.
Intercalado en la historia, está el ensayo: los grandes acontecimientos que tuvieron lugar en Francia en aquella época están detallados por el autor en el libro. La revolución francesa, Waterloo, la restauración de la monarquía y las revueltas de mitad del siglo XIX en las calles de París. Incluso una explicación exhaustiva de las alcantarillas de la capital francesa. He de reconocer que es una gozada leer a este hombre, sus opiniones (aboga por la educación pública y obligatoria para todos los niños, por ejemplo) y sus explicaciones, porque escribe como los ángeles; pero también es verdad que muchas veces sientes que te está cortando la historia, y lo que tú quieres saber es lo que les pasa a los personajes. Como nadie me había avisado de nada, al principio me disgustaban un poco estas salidas por la tangente pero luego, como ya sabes lo que hay, lo lees de otra manera más tolerante
.La historia es muuuuy bonita y tiene momentos memorables que no se te olvidarán en la vida. Por ejemplo, cuando Juan Valjean roba unos candelabros al obispo, los guardias le pillan y el obispo les dice que él se los había regalado, para que no le apresen de nuevo. O cuando la pobre Cosette dejaba sus zuecos en la chimenea la noche de Nochebuena, y solo aparecían monedas en los zapatos de las niñas de los Thénardier, pero no en su zuequito…. A mí se me humedecían los ojos con la pobre niña. Todavía me acuerdo y me pongo triste, de verdad.
El estilo del autor es “tipo clásico”, es decir, que la historia va a un ritmo bastante lento y todo está lleno de detalles. Además es un libro de un volumen considerable, así que me parece solo apto para épocas en las que uno tiene mucho tiempo de leer; creo que me hubiera agobiado bastante si no lo hubiera leído en verano, porque los ensayos no son precisamente para “evadirse”, sino para leer con toda tu atención porque es más espeso que una novela. Una vez que te acostumbras a los cambios de tercio, la cosa va bien, aunque hay que reconocer que ha habido discursos que son un tostón, como cuando te explica palabra por palabra el lenguaje caló, que viene a ser algo así como la forma de hablar de la gente de la calle, gitanos y tal, o cuando explica la distribución del París de aquella época, calle por calle. Por cosas como estas es por lo que no se lleva los 5 libritos.
Peeeeero la historia es preciosa. Que cada uno decida si lo quiere leer o no, y cuándo hacerlo
Título: Los miserables Autor: Victor Hugo Editorial: Debolsillo Encuadernación: Dos libros de bolsillo, con una caja para guardarlos ISBN (1er libro): 978-84-9908-072-7 ISBN (2º libro): 978-84-9908-073-4 Páginas: 1002 + 742 Precio: 17,90 € Propósito personal: sí lo cumple, me quedan 52.RETO 2011: Rodio, Rh