Bruce Bingham Cassiday nació en Los Ángeles, en 1920. Se licenció en periodismo en 1942 en periodismo en la UCLA y combatió en África e Italia durante la Segunda Guerra Mundial. A su regreso, se profesionalizó como
escritor, especializándose en anuncios publicitarios o dramas radiofónicos. En 1950 se casó con Doris Galloway, de la que tendría dos hijos. También publicó en revistas pulp como All-Story Detective y Dime Detective, y fue editor en Argosy en 1954-1973. Además de su propio nombre, publicó bajo numerosos pseudónimos, como “Carson Bingham”, “Robert Faraday” o “Con Steffanson”. Falleció en 2005, en Stamford (Connecticut), a consecuencia del Parkinson.
Como “Carson Bingham” escribió Gorgo (1960), que sería adaptada al cine el año siguiente por Eugène Lourié, que
ya había dirigido otras dos películas con dinosauroides, The Beast from 20,000 Fathoms (1953) y The Giant Behemoth (1958). También tuvo una versión en viñetas, en la primera entrega de una serie (Joe Gill y Steve Ditko, 1961-1965) con 22 episodios nuevos, a los que habría añadir dos números especiales.
A diferencia de la película (y el cómic), en la novela de Cassiday, Gorgo es originario de un atolón del Pacífico. El libro es siniestro desde el principio y destaca el personaje de Moira, que haciendo honor a su nombre presagia los desastres que van a acontecer, anticipando el papel de la vieja gitana de El valle de Gwangi (Jim O’Connolly, 1969). El kaiju protagonista es descrito como un “saurio prehistórico de 20 pies de altura, un lagarto marino gigante de algún tipo que quedó de la Era Mesozoica... ciertamente nunca visto... [en] ningún libro de texto”. Gorgo mata a un elefante en el circo, en una escena que se decidió eliminar al adaptar el guión cinematográfico y, a diferencia de los cómics, el ejército rehusa utilizar armas atómicas para liquidar al monstruo, debido a las áreas densamente pobladas en juego. Slade describe el sombrío panorama final: “Bombas H. Bombas A. Infinito. Exploración espacial. Desvelar el secreto de la vida. Me pregunté si la humanidad haría caso a la advertencia. Lo dudé. El hombre es capaz de enfrentarse incluso a los retos más difíciles del universo y de la vida misma”. Si se hubiera filmado esta versión, sin duda Gorgo hoy sería
visto como el indiscutible Godzilla occidental [1].
Como “Robert Faraday” escribió “The Anytime Rings” (1963), primera entrega de la serie Adventures in the Time Machine, a la que siguió el peplum “Samax the Gladiator” (1964). Dos amigos visitan un carnaval donde uno de los espectáculos cuenta con un Cynognathus (un terápsido del Triásico con aspecto de perro grande) vivo, traído al presente por el dueño de la feria que tiene un anillo mágico que le permite viajar en el tiempo. Los chavales usan el anillo para devolver al animal, que atiende por Nog, a su época. Bueno, ya sabemos que en los mundos de paleoficción, la prehistoria suele formar un bloque monolítico que se extiende del Paleolítico al Precámbrico. Aunque al final es el propio terápsido el que los rescata a ellos de una tribu de amenazantes cavernícolas.
Tira de prensa con pterosauroide de "The Witch Queen of Mongo"
Como “Con Steffanson” [2] y, de nuevo, “Carson Bingham” desarrolló las aventuras de Flash Gordon en “The War of the Cybernauts” (1975) y otras dos novelas:
Viñeta de "The Time Pendulum"
“The Time Trap of Ming XIII” (1974) corresponde a las tiras del 9 de diciembre de 1957 al 25 de enero de 1958, publicadas originalmente bajo el título “The Time Pendulum” y dibujadas por Dan Barry, justo antes de que Harry Harrison se hiciera cargo de los guiones. Flash sufre un atentado por parte de unos enviados por Ming XIII desde el futuro, de donde procede también un segundo Flash que aparece para auxiliarle, creando una paradoja temporal. Finalmente, el héroe es transportado por el Tempendulum –el curioso nombre de la máquina que ha llevado a los crononautas– a través del tiempo, pasando por el Mesozoico, y luego hasta el futuro, donde comprende lo que ha pasado y regresa para ayudarse a sí mismo.
“The Witch Queen of Mongo” (1974) se publicó originalmente en la prensa, en las tiras del 21 de abril al 13 de octubre de 1935. Fue el episodio en el que Don Moore comenzó a colaborar en Flash Gordon, hasta entonces realizado en exclusiva por Alex Raymond. La reina bruja de los hombres-magia azules ve desde su bola de cristal en el castillo de Azura la llegada del ejército Flash a su reino cavernario y lo entierra bajo una avalancha de rocas, dejando sin sentido a sus líderes con gas. Después, hace perder al héroe la memoria con un bebedizo y lo convierte en su consorte, mientras Dale es esclavizada y flagelada. Finalmente, Zarkov consigue dar el cambiazo a la copa de la droga de Flash, que recupera la memoria al tiempo que la reina pierde la suya.
-----
[1] Dinosaur Ever Evolving (Debus, A. A., 2016).[2] Ron Goulart (1933-2022) adaptó las tres primeras novelas de la colección compartiendo el pseudónimo de “Con Steffanson”, comenzando por “The Lion Men of Mongo” (1974), en la que encontramos algunos dinosauroides.